 Después de tantear a entrenadores con mayor nombre o bastante más caché, la de Antonio Gómez es sin duda una apuesta arriesgada. Así lo presentó Carlos Suárez, presidente del Real Valladolid, en su puesta de largo como técnico del club blanquivioleta.
Después de tantear a entrenadores con mayor nombre o bastante más caché, la de Antonio Gómez es sin duda una apuesta arriesgada. Así lo presentó Carlos Suárez, presidente del Real Valladolid, en su puesta de largo como técnico del club blanquivioleta.
Será éste el primer equipo profesional que dirija el madrileño, pese a lo cual afirma no tener miedo. “Soy muy ambicioso. Vengo con humildad, ilusión y ganas de trabajar”, dice un hombre que manejaba otras dos ofertas de la segunda división.
Se decantó por la albivioleta por ser “la mejor opción para mí. Es un orgullo venir a un club como éste, aunque es una responsabilidad máxima. Espero estar a la altura y responder a la confianza que han depositado en mí”.
Sobre el nuevo formato de competición, considera que “la competición será mucho más dura este año. El sistema ha cambiado y será más difícil. En Inglaterra, llevan muchos años con la promoción de ascenso. Incluso la temporada pasada subió el que quedó en la sexta posición. El objetivo es ir paso a paso y estar arriba desde el principio”.
Después de diversas conversaciones con Carlos Suárez y el club, se pondrá ahora manos a la obra en la confección de la que será su plantilla, a falta de que se confirme quién será el nuevo director deportivo.
Sobre esta figura afirmó Carlos Suárez que se busca una similar sintonía a la del nuevo míster, buscando así no repetir los errores del pasado. “Los jugadores que vengan queremos que sean del agrado del entrenador, no pase como el año pasado que muchos de ellos no se adaptaron al sistema del técnico. Lo vamos a hablar todo con él de cara a la confección de la plantilla y no vamos a tener ninguna prisa en incorporar a los jugadores. La pretemporada lo más seguro que se hará en Escocia”.
Ésta, puntualizó Gómez, empezará sobre el 15 de julio con los test médicos y físicos a unos jugadores, los que están y los que han de venir, que han de “estar implicados desde el primer momento” con un proyecto que en el plano táctico beberá primordialmente de la fuente de un ex blanquivioleta como Rafael Benítez.
Con él pudo haber seguido el ex jugador de Real Madrid o Sevilla, si bien llega ahora a Valladolid para poner en liza un juego en el que primarán “el 4-4-2 o el 4-3-2-1, jugar con futbolistas específicos de banda y rápidos”.
