Análisis del próximo rival del Real Valladolid.
Vuelta a casa para el Real Valladolid. Vuelta a Zorrilla, el lugar que parece la fortaleza de un conjunto incapaz de sacar puntos lejos de la capital del Pisuerga desde la primera jornada. Vuelta también a los partidos de los lunes, algo en lo que parece emperrada la Liga de Fútbol Profesional.
Pero no es tiempo de fijarse en el horario del partido. Es hora de preocuparse de un rival por la permanencia, que tampoco vive un gran momento en cuanto a resultados. Los txuri urdin acumulan dos derrotas consecutivas y no han sido capaces de arrancar ni un solo punto cada vez que cogen el autobús para competir lejos de Anoeta.
Un viajero poco resultadista
Y es que la Real Sociedad, que lleva tres victorias y cinco derrotas en Liga, ha disputado hasta el momento cuatro de estos partidos como visitante. El resultado no podía ser más negativo para los de Philippe Montanier, con un póker de derrotas. Barcelona, Mallorca, Levante y Betis han sido los verdugos.
A pesar de todo, el equipo donostiarra compensa los malos resultados fuera con buenos partidos y victorias en casa, donde sí ha logrado los tres triunfos ligueros que lleva hasta el momento y que le permiten ocupar el decimoquinto puesto de la tabla antes de comenzar la jornada, a tres puntos del descenso que marca el Deportivo con seis.
No termina ahí la hecatombe de la Real como visitante. Sus números goleadores son también poco halagüeños en las porterías lejanas a San Sebastián. Dos goles a favor, diez demoledores martillazos en contra. Un bagaje muy pequeño y demasiado grande, respectivamente, para los vascos. Solo medio tanto a favor y 2’5 en contra por partido. Escalofriante.
De todos modos, no deben confiarse los de Djukic ni mucho menos. En la mayoría de estos cuatro encuentros como visitante, la Real Sociedad vendió cara su piel y estuvo cerca de escapar con un botín que siempre se le ha resistido o por equivocaciones puntuales de Montanier o, simplemente, por mala suerte.
Calidad para romper la racha
Estas estadísticas del equipo vasco se hacen más llamativas si se tienen en cuenta los nombres con los que cuenta de medio campo para adelante. Xabi Prieto, Griezzman, Carlos Vela, Agirretxe… Todo un arsenal que hace más peculiar que no hayan sacado ni un solo punto fuera de casa.
Bien es cierto que semejante tropel de ‘killers’ no acumula demasiadas muescas en el revólver. El francés Griezmann, clave en el conjunto txuri urdin, tan solo ha aportado un gol en Liga hasta el momento. Agirretxe y Carlos Vela son los que portan la vitola de pichichis del equipo con dos tantos, aunque el segundo ha fabricado sus dos goles desde el punto de penalti.
Chori Castro, que llegase el pasado verano como fichaje estrella procedente del Mallorca, por ahora tiene que conformarse con ser el revulsivo del equipo, ya que en los seis encuentros en los que ha tomado participación, cinco han sido partiendo desde el banquillo. Al igual que Griezmann, el uruguayo tan solo ha aportado un gol.
Hay otro detalle más del que deberían estar pendientes Djukic y sus chicos. Puede parecer insignificante, pero es un dato a fin de cuentas. La Real Sociedad no ha sido capaz de marcar ni un gol en los últimos quince minutos de cada parte, ni de la segunda ni de la primera. De ello se puede deducir que los vascos llegan justos de gasolina al final de cada parte.
Curiosidad del rival de esta jornada: Philippe Montanier, que comienza su segunda temporada como entrenador de la Real Sociedad, no se trata de uno de los técnicos de los que más se hable en la liga española. Pero la cuestión es que el francés tiene mérito. Lo que pocos saben es que Monti, antes de llegar a San Sebastián, consiguió ascender al modesto Bologne desde lo que sería la cuarta división francesa hasta Primera en solo cinco años.