Miroslav Djukic compareció en rueda de prensa para hablar de su enigmático futuro y del partido ante el Celta de Vigo del próximo domingo.
El entrenador del Real Valladolid, Miroslav Djukic, atendió a los medios de comunicación para analizar el partido ante el Celta de Vigo, pero sobre todo para hablar sobre su futuro, que de momento se desconoce.
Con respecto a los gallegos, el serbio quiere olvidar los piques del año pasado (el Celta ganó en Zorrilla y posteriormente empató a cero contra el Córdoba, punto que les daba el ascenso directo).
“Tenemos que terminar nuestro trabajo como profesionales, no hay revanchas. Tenemos que salir a buscar la victoria en casa y poner a nuestro club lo más alto posible, porque el club se beneficia económicamente. Sobre todo, debemos cumplir con la profesionalidad y en estas dos jornadas debemos mostrar lo que somos”.
Djukic, que siempre ha defendido el fair-play, considera que “en estos dos años que hemos estado juntos hemos buscado la victoria con nuestras premisas de juego y no vamos a entrar en un juego que no queremos. Siempre hemos buscado la limpieza y la honestidad del fútbol. Vamos a hacer los deberes y hacer lo que se debe como un buen profesional”. “No es lo mismo irse de vacaciones con los dos partidos que quedan si se ganan que si perdemos”, añadió, por lo que se espera un Pucela competitivo en lo que resta de temporada.
Para ese partido, habrá variaciones en el once, toda vez que Henrique Sereno está entrenando con el peto de titular. Del portugués, el míster blanquivioleta afirmó que “Sereno ha hecho cosas muy buenas con nosotros. Es un jugador que nos aporta mucho: aporta serenidad, contundencia, rápido… Es un jugador a tener en cuenta”.
Como no podía ser de otra forma, el tema estrella de la rueda de prensa fue el futuro del Miroslav Djukic. El serbio tiene sellados los labios hasta que el equipo no termine la temporada en Mallorca: “No voy a decir hasta el último partido lo que voy a hacer. Lo importante es que el equipo está haciendo cosas extraordinarias y espero que sea una ovación de reconocimiento al equipo. Las personas se quedan o no, pero lo importante es el club”.
El balcánico subrayó que “la decisión no está tomada, no tengo nada con nadie, todo está abierto. Sí existe la posibilidad de seguir la temporada que viene”.
Su continuidad o ausencia no hace que desde la dirección deportiva no puedan planificar la campaña siguiente, es más el propio Djukic está ayudando en la planificación continuamente: “Yo supongo que el Valladolid vaya a por los jugadores buenos que considere factibles, sea Djukic o no. El club funciona por encima del entrenador, porque ha habido jugadores que a mi parecer no me gustan y se han incorporado”.
Por último, quiso dejar claro que “nunca he tenido miedo a los retos ni he llorado. Siempre he dicho que tengo el mejor equipo del mundo y ellos lo han demostrado. Aquí hay mucho margen de progresión, tanto en los jugadores como en el club”.

