Análisis del próximo rival del Real Valladolid.
Se trata de un recién ascendido, pero al leer los nombres con los que cuenta el Villarreal lo normal es que cualquier aficionado rival se eche a temblar. Gio Dos Santos, Cani, Uche, Jonathan Pereira, Bruno… Todo un elenco de jugadores impropio de un equipo que acaba de regresar a Primera tras un año de purgar sus pecados en Segunda División.
Y es que cuando el Submarino estuvo en la Liga de plata era difícil creer que pudiera estar ahí una sola temporada “extra” comparando jugadores y presupuesto con el del resto de equipos. Ahora toca que el Villarreal comience a dar guerra.
Buen inicio
No tuvo mal comienzo el conjunto castellonense en el arranque de temporada, eso sí, por los pelos. Fue en el Estadio de los Juegos Mediterráneos donde los de Marcelino García Toral sacaron los tres primeros puntos del ejercicio, en un choque en el que Gio estableció el empate a dos en el minuto 83 y Jonathan Pereira dio el toque de gracia solo dos minutos después para culminar una remontada loca.
De esta manera terminaron por imponerse las buenas sensaciones que los castellonenses habían creado durante la pretemporada, que con cuatro partidos fueron capaces de convencer a una afición ya ilusionada con el simple hecho de volver a Primera. Si cuatro fueron los amistosos que realizó el anterior rival del Pucela, el Athletic, el Villarreal no se movió en una línea diferente.
Dos victorias y dos derrotas fueron el bagaje de los amarillos, pese a las impresiones positivas. El primer envite acabó con victoria por 1-2 frente al Nástic de Tarragona, el segundo con derrota por 1-0 ante el Hércules, el tercero con remontada para acabar 1-3 contra el Brighton inglés y el cuarto y último choque con una curiosa derrota por 1-0 ante el Almería, en un partido que poco se pareció al de la primera jornada tanto en resultado como en desarrollo.
La cuestión es que Marcelino ha conseguido crear un once de garantías y bastante fiable para lograr la permanencia, pese a algunas bajas tan claves como la de Javi Venta, Joan Oriol, Mellberg o Marcos Senna, rumbo a Estados Unidos a un retiro dorado tras dejar al Villarreal con los deberes hechos. En el otro lado, las incorporaciones no son de especial renombre, pero sí hay alguna que otra bastante interesante.
Bloque con retoques
Como todos los equipos recién ascendidos, el Villarreal busca cimentar su permanencia en un bloque que, dentro de las marchas ya comentadas, siga lo más intacto posible. Para ello ha habido que fichar a algunos jugadores para tapar los agujeros creados este verano. A saber, Pantic del Estrella Roja, Jokic del Chievo Verona, el ex pucelano Asenjo y dos grandes incorporaciones pescadas de las aguas revueltas de Mallorca, dos perlas como Gio Dos Santos y Pina.
Un descenso desde los infiernos bien merecen un par de llegadas capaces de aguantar al equipo en Primera. 42 sufridos partidos en los que hubo que luchar hasta el final para acabar segundo en la tabla, en una pelea en la que dicho puesto y el primero valen lo mismo, no así desde el tercero hasta el sexto. El Villarreal consiguió 77 puntos, tres más que el Almería, en lo que fue un año para recordar.
Pero volviendo a los fichajes, Gio se trata de una incorporación que necesita poca presentación.
Buen golpeo de balón, desmarque y oportunismo, justo lo que necesitaba el Submarino arriba en una temporada que no puede permitirse otro descenso. Unido a una pareja de baile como Uche, veloz como un rayo, y a la capacidad de generar juego de Bruno y Pina, el Villarreal es un equipo duro de pelar.
Complementados además con el “orden táctico que Marcelino da a todos sus equipos”, en boca de Juan Ignacio Martínez, sacar los tres puntos de El Madrigal se antoja complicado. Más le vale al Pucela andar con pies de plomo.
Curiosidad del rival de esta jornada: El recién marchado Marcos Senna siempre será recordado con cariño en Villarreal tras once temporadas como jugador amarillo. 363 partidos, complementados con 31 goles y un repertorio de grandes partidos hacen del hispano brasileño toda una leyenda viva del Submarino amarillo.