Juan Ignacio Martínez compareció en la rueda de prensa post-partido para analizar el punto conseguido ante los chés que permite al Real Valladolid dormir fuera de descenso

Juan Ignacio Martínez compareció ante los medios de comunicación congregados en la sala de prensa de Zorrilla con la convicción de que sumar siempre es importante y cada punto obtenido de un empate puede ser decisivo en la salvación. Pero reconoció que delante estaba el Valencia, del que ha dicho que “no es un rival cualquiera”.
“Es difícil ganar el partido, pero cualquier manifestación que haga hoy aquí espero que no se malinterprete porque yo creo que demuestro que soy ambicioso y ganador. Estamos hablando de que enfrente estaba el Valencia, no es un rival cualquiera”.
Sumar siempre es importante, queríamos sumar de tres puntos y más sabiendo de la dificultad del partido”, explicó el técnico blanquivioleta.
El choque se antojaba de alto voltaje, y más, sabiendo ya los resultados de los rivales directos. “Cuesta muchas veces imprimir esa tranquilidad y dudas que hemos generado al inicio en un par de jugadas”, declaró Juan Ignacio.
Pese a eso, quiso hacer hincapié en que no hay dos partidos iguales y es absurdo intentar “comparar” el envite ante el Valencia con el pasado ante el Almería.
Al Almería, rival directo, se le venció y ahora toca Osasuna el próximo viernes en el Sadar. La cosa cada vez se complica más y las victorias se venden más caras. Véase la del Elche ante el Getafe en el último minuto de partido. Juan Ignacio es consciente de eso y lo ratifica: “A partir de ahora los partidos se van a decantar por detalles”.
Granito a granito se hace granero dice el refrán. Pero quizá punto a punto no se logre el objetivo. El Pucela es el rey del empate de esta Liga BBVA, algo que el míster conoce perfectamente y espera que se sume de tres en tres. “Somos conscientes de lo de los empates. Ojalá este punto sea importante al final. Todavía tienen que pasar por aquí Madrid, Espanyol y Granada y tenemos el de Osasuna, que ahora mismo es el más importante“, espetó.
Juan Ignacio Martínez fue preguntado por los cambios que realizó durante el choque. Álvaro Rubio fue uno de ellos. El míster explicó que el mediocentro ha sufrido diversas molestias y que no sabría si iba llegar en condiciones a la hora del partido. Finalmente, pudo contar con él, aunque no los noventa minutos. Por su parte, Larsson, que recibió un balonazo en la cara, tuvo que ser sustituido porque “se encontraba grogui”.
Dos cambios por razones médicas y uno por decisión técnica. El de Manucho por Bergdich. “Sé que es un cambio impopular”, reconoció el técnico. Con la salida del terreno de juego de Manucho y la entrada de Bergdich buscaba “desequilibrio”, a la vez que apostar otra vez por “la pareja Óscar-Javi”.
Respecto al Valencia, Juan Ignacio Martínez dijo: “Me ha parecido un buen equipo que nos ha generado muchos problemas. Estábamos convencidos de que íbamos a ganarles por ese punto extra de motivación, sabiendo los resultados rivales. No ha podido ser y hay que felicitar al rival”.
Pizzi: “Nos ha faltado contundencia”

Pizzi, entrenador del Valencia, también habló en rueda de prensa. El míster ché lamentó la falta de puntería de su equipo y la poca contundencia que tuvieron sus jugadores de cara a la portería defendida por Jaime.
“Nos faltó concretar con mayor contundencia las situaciones de gol que tuvimos. Podríamos haber marcado, pero siempre la acción del gol requiere mucha contundencia y es lo que nos ha faltado hoy. No me preocupa la falta de gol, sino no haber podido ganar”, afirmó.
El resto de sus declaraciones se basaron sobre todo en la vuelta de la Europa League que se celebrará el próximo jueves y a la que llegan con una clara desventaja. A pesar de eso, se declaró “optimista” y apostó por una “mentalidad” ganadora.
Pizzi cree que el partido ante el Basilea ahora mismo es lo único importante, y que después del jueves “pensaremos en el siguiente partido”. Pese a eso, reconoció que “las matemáticas son exactas” y es “difícil” alcanzar la zona Champions.
