El Real Valladolid visita al Celta de Vigo, mañana a partir de las diez de la noche, en el partido que cierra la trigésimo quinta jornada de la Liga BBVA
Dieciséis días. 407 horas. 24.420 minutos. Todo ese tiempo es el que el Real Valladolid va a estar sin competir hasta que el balón comience a rodar mañana en Balaídos. Y no es que haya habido parón por compromisos de las diferentes selecciones o algo parecido. No. Es que la Liga de Fútbol Profesional, en un nuevo acto que adultera la competición decidió en su día aplazar el partido Real Valladolid – Real Madrid porque los blancos tenían que descansar para estar a punto en la Champions.
No contentos con eso, la LFP dispuso que los blanquivioletas jugarían el lunes, en el choque que cierra trigésimo quinta jornada. Por si no le había dado tiempo a descansar lo suficiente (entiéndase la ironía).
Así pues, el Real Valladolid visita al Real Club Celta de Vigo, mañana a partir de las diez de la noche, con el único objetivo de lograr tres puntos de oro que le mantengan en la pelea por la salvación. Bien es cierto que los vallisoletanos llegarán a este partido en puestos de descenso, pero en inferioridad de condiciones al haber disputado un partido menos.
Los de Juan Ignacio Martínez se sitúan en la decimonovena posición con 32 puntos, a tres del Getafe que es el equipo que ahora mismo marca la permanencia y al que los blanquivioleta tienen el golaveraje ganado.
Con tantos días de diferencia entre el partido del Osasuna (recordemos que fue el once de abril) y el que se disputará mañana, al Real Valladolid le ha dado tiempo a hacer de todo. El cuerpo técnico ha preparado sesiones de entrenamiento diseñadas específicamente para aminorar los daños de tantos días sin competición oficial. También ha dado más descansos de los habituales y hasta se han disputado dos amistosos.
El primero tuvo lugar en Los Anexos ante la Selección de Castilla y León. El segundo, el pasado miércoles en El Plantío donde los pucelanos cayeron ante el Burgos, equipo de Segunda División B por la mínima. Estos dos enfrentamientos se programaron con la intención de que la plantilla mantuviera, en la medida de lo posible, el ritmo de partidos normal.
Sobre este tema han hablado varios jugadores en zona mixta. Rueda, entre otros, ha expresado el malestar de la plantilla. “El parón no lo entendemos ninguno y es algo que desvirtúa la competición”, lamentó el central pacense. Víctor Pérez, por su parte señaló a este respecto que están “cabreados”, ya que “no competir en dieciséis días nos perjudica”.
Mientras tanto, Juan Ignacio Martínez resaltó la importancia del partido de mañana en Vigo, además de recordar lo que queda por venir: “En veinte días tenemos una maratón de partidos”. Dejando al margen este tema, el alicantino hizo hincapié en la importancia de ganar al Celta. Sobre los celestes dijo que son un conjunto “muy ofensivo” con “jugadores muy rápidos”.
Para este duelo vital por la permanencia, el míster blanquivioleta dispone de todos los jugadores, toda vez que Víctor Pérez, Sastre y Rukavina han superado sus molestias. Juan Ignacio, por tanto, ha tenido que hacer cuatro descartes por decisión técnica, que son los mismos que en las últimas jornadas. Sastre, Baraja, Heinz y Valdet Rama no viajarán a tierras gallegas.
JIM ha convocado a los siguientes jugadores: Diego Mariño, Jaime, Rukavina, Jesús Rueda, Marc Valiente, Mitrovic, Peña, Bergdich, Álvaro Rubio, Víctor Pérez, Rossi, Larsson, Omar, Jeffren, Óscar, Osorio, Manucho y Javi Guerra.
En el lado contrario estará el Celta de Vigo. Los gallegos llegan a este partido en la decimotercera posición con cuarenta puntos, con todos los partidos que debiera disputados. Los de Luis Enrique, tras ganar al Almería a domicilio por 2-4, tienen en su mano la posibilidad de lograr la salvación con tiempo.
Para este enfrentamiento, Luis Enrique tiene a su disposición a toda la plantilla celeste, salvo a Wellinton. Finalmente, Augusto ha superado la rotura fibrilar y podrá ser de la partida.
Enfrentamientos históricos
Celta de
Vigo y Real Valladolid se han enfrentado en veintisiete ocasiones en la máxima categoría del fútbol español en tierras gallegas. De esas veces, los locales han vencido en catorce ocasiones, mientras que los visitantes se han llevado el gato al agua en tan solo tres. El empate se ha dado en diez de los veintisiete duelos.
El año pasado, el Real Valladolid sucumbió en Balaídos por 3-1 el día de Reyes. Iago Aspas en dos ocasiones y Álex López fueron los goleadores celestes. Por parte de los blanquivioletas, Alberto Bueno fue el encargado de marcar el gol.
Pero entre Celta y Real Valladolid existe una rivalidad de un tiempo a esta parte. Exactamente desde la temporada 2011/2012, la del ascenso de Djukic. Celta y Córdoba se enfrentaban en la última jornada de la liga regular. A ambos les hacía falta un punto para conseguir su objetivo, el de los primeros lograr el ascenso matemático y a los segundos, clasificarse para el play-off. El duelo terminó con un sospechoso empate a cero en el que apenas se registraron lanzamientos a puerta.
Además, la temporada pasada ya en Primera División, el Real Valladolid sucumbió en Zorrilla ante el propio Celta, que logró en el estadio blanquivioleta la salvación matemática en la penúltima jornada.
Partidos en lunes
El Real Valladolid disputará ante el Celta de Vigo el cuarto partido de Liga en lunes. Los tres primeros fueron ante el Elche, Athletic de Bilbao y, precisamente Celta de Vigo. Ante los ilicitanos el resultado final fue de empate; ante los vascos, derrota y contra los gallegos victoria por 3-0 con un hat-trick de Javi Guerra.
Los de Luis Enrique han jugado más en el primer día de la semana. Hasta seis choques, que con este serán siete, han disputado un lunes. El Celta jugó ante Espanyol, Levante, Real Madrid y Athletic Club de Bilbao en Balaídos; mientras que se midió a Real Valladolid y Athletic de Bilbao a domicilio en lunes.
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