El derbi se lo llevó el conjunto local con un polémico gol de Berrocal, tras una asistencia desde fuera del campo de Pablo Infante. Los bercianos supieron contrarrestar el arreón inicial rojillo y consiguieron los tres puntos ante un rival que terminó con diez por expulsión de Aitor
Ponferradina 1 – Mirandés 0

El encuentro de las cuatro comenzó con fuerza para el equipo burgalés y con un Pedro muy activo en ataque que a los cinco minutos tuvo la primera gran ocasión del partido. El ex del Numancia presionó a Lucas, que sustituía al lesionado Alan Baró, y al entrar en el área y regatear a su compañero Aguilar, no logró hacer lo mismo con el meta Dinu. El malagueño se ganó la titularidad en detrimento de un Urko Vera que jugó casi toda la segunda parte.
Sin embargo la intensidad mirandesista duró quince minutos y la balanza se equilibró. Más que equilibrarse, se decantó a favor del conjunto blanquiazul.
Pablo Infante, motivado en el partido de su vida, avisaba de libre directo cerca de la frontal y a los pocos minutos reclamaba un penalti por manos de Aitor, que el colegiado no entendió como infracción. El lateral asturiano no jugó todo el partido, pues se fue expulsado a falta de quince minutos para el final. Antes del descanso Lucas remató solo en un saque de esquina y el meta visitante Sergio Pérez estuvo atento para recoger su rechazo.
Al comienzo del segundo tiempo más de lo mismo. La Ponferradina atacaba por el lado derecho de Aitor y, en el 50′, Pablo mandaba un pase en largo a Yuri para que este entrase en el área aunque falló en el golpeo cruzado. Luego fue al revés, pues una acción individual del brasileño por el carril de Kijera terminó en un pase en horizontal para que el burgalés rematase centrado con un tiro con efecto. Durante el encuentro Infante vio sangre en el flanco izquierdo y minutos después era el lateral Camille el que se atrevía a intentarlo.

La peor de las noticias para los de Terrazas llegaba a quince minutos para el final, cuando Aitor se iba expulsado por una entrada sobre Berrocal a la altura del pecho, una acción que podría haber sido castigada como simple falta pero que el colegiado amonestó con segunda amarilla.
El partido cambiaba para los rojillos al tener que actuar Barahona como lateral derecho. Un Barahona protagonista del partido en tercera persona, pues vio como Pablo Infante le regateaba y desde la línea de fondo daba el pase de la muerte a Berrocal para hacer el 1-0 ante las protestas de los visitantes. Y con razón, porque en un principio el árbitro señaló saque de puerta.
Con el partido en contra para el Mirandés y a punto de concluir, Urko Vera sacaba de la nada un disparo peligroso pero que no iba entre los tres palos de Dinu. La última jugada de la contienda fue de Acorán que otra vez partiendo desde el carril izquierdo puso en aprietos a Sergio Pérez con un disparo que el canterano desviaba a saque de esquina.
Cinco de cinco y la Ponferradina sigue invicta en El Toralín para colocarse en el quinto lugar de la clasificación y olvidar la derrota de Girona. La próxima jornada los de Díaz viajan a Valladolid para medirse en otro derbi al colíder de la liga. Por su parte, el Mirandés se mantiene en zona de descenso y cae después de haber vencido al Numancia la pasada semana. Ahora le toca recibir al colista, el Albacete, pero antes le espera el Alavés en la Copa del Rey.
