David Bombín, Miguel Ángel Carrasco y Daniel Juan han publicado el ‘Manual Básico del Entrenamiento de Fútbol Base’, en el cual compilan algunos de sus ejercicios a fin de que sirvan de ayuda a técnicos sin experiencia –o con ella– en el entorno del balompié formativo

La gente de fútbol se ve en los campos de fútbol, y más si es en fin de semana. Me van a permitir que utilice la primera persona, pero así fue mi encuentro con David Bombín, Miguel Ángel Carrasco y Daniel Juan, tres entrenadores de la provincia que vienen de embarcarse en la aventura de publicar un manual sobre su pasión, el fútbol formativo.
Quedar en un campo de fútbol con gente de fútbol supone un ‘problema’, así, entrecomillado, porque supone que la charla se puede prolongar por el encuentro con conocidos varios. Problema bendito cuando sirve esto para compartir con terceros corrillos a los que solo la falta de un balón en los pies impide llamarse rondos.
Además la charla se alarga si uno es gallego, y por tanto tendente a la conversación y el desorden. Para el análisis de esta segunda cuestión reservaremos, quizá, otro momento. Vamos, empero, con la primera: por más que suene a Perogrullo –incluso, también a peloteo, en el caso que aquí nos ocupa–, hay a quien se le adivina la pasión en dos frases. Con quien los partidos –y las charlas– se degustan.
Bajo palos se pone un redactor de este portal. Después de un rato divagando sobre cómo es ser entrenador de fútbol base. Una de las primeras premisas consensuadas es que es necesario. Cada vez hay más niños que juegan, y por tanto la figura hace falta. Es también sacrificado, por los pequeños, y tanto o más por sus padres, por las horas que se emplean y porque, a veces, la retribución es escasa –no hablemos ya de dinero; apenas hay– y los disgustos excesivos.
Ser técnico en fútbol formativo supone que muchas veces te llamen chalado o cosas peores. Tus amigos a veces no entienden y menos lo hacen los padres, jueguen más o menos sus hijos, mejor o peor. No supone ser el mayor enemigo porque ese puesto es para el colegiado, pero, en ocasiones, se le acerca. Aunque no siempre. “No hay mejor ‘sueldo’ que chicos a los que entrenaste hace años te recuerden y saluden con cariño. A veces cuesta, tiene una ‘parte oscura’, pero esa alquimia es con lo que te quedas”, comenta Daniel Juan.
Lo dice él, que ha sido padre hace poco. Y a quien, sobra decir, antes han saludado con efusividad algunos de sus exjugadores. Y sin embargo, algo tiene el fútbol que embulle, que une. A él, y a sus dos buenos amigos, en torno a una idea: compartir su experiencia a través de un libro de formación. Lo cual tampoco ha sido fácil. “Lo primero que nos encontramos fue con las dificultades del mercado”, explica David Bombín.
Sucede que, o eres un técnico de renombre o es territorio vedado. Si quieres editar un puñado de libros, te toca rascarte el bolsillo… salvo que explores nuevas vías. Así lo hicieron ellos tres. Daniel halló otro camino, el publicarlo a través de pantallas, y no en formato papel, a través de Google Play y para Kindle. No obstante, “como hay quien aún quiere tocar”, el ‘Manual Básico del Entrenador de Fútbol Base’, junto con su cuaderno, también se puede encontrar en Amazon.
Básico… pero también necesario

Foto: Pasaje Fotógrafos
Pero, ¿por qué publicar? Por el mero afán compartir. Y, aunque pueda sonar pretencioso, para ayudar; para que aquellos que llegan sin conocimiento al mundillo tengan de donde beber.
“Para nosotros no es una Biblia, pero puede serlo para quien no sabe nada. Para quien sabe mucho, en cambio, puede servir para sacar una idea. O quizá para nada”, reconoce Miguel Ángel Carrasco. Ni siquiera en el Juventud Rondilla, donde ejerce como director deportivo, se viene usando como vademécum el manual. Con su publicación no buscaban ni enriquecerse ni sentar cátedra. Incluso allí donde puede ejercer influencia la libertad es total.
Con todo, y desde una absoluta humildad, creen que un libro como el suyo puede ser necesario. “A los clubes llega mucha gente creyendo saber de fútbol, pero que no sabe lo que es entrenar. Este manual puede servir como una base de la que tirar. Son ejercicios probados, matizados y temporizados en varios niveles. Al entrenador le puede servir para crear su propia metodología de trabajo”.
Y es que, aunque ellos tengan su propio estilo a la hora de dirigir, el libro no es integrista de uno solo; en él se encuentran prácticas para trabajar múltiples aspectos que huyen de la exclusión y del adoctrinamiento. Lo mismo uno puede encontrar ejercicios de posesión que para explotar el repliegue y el contragolpe. Y no solo eso, sino que el cuaderno que acompaña al manual sirve para desarrollar una programación propia de una temporada completa.
Quizá de soslayo se pueda ver que el fútbol que ellos promulgan cuando ocupan un banquillo es el del buen trato del balón, el que se encuentra hoy en día más extendido, después de los conocidos éxitos del Fútbol Club Barcelona y de la selección española. Aunque, por encima de ello, se desprende la necesidad de saber qué se quiere y de enseñar al jugador a pensar. “Esa es la orientación, hacia el respeto a los jugadores y hacia su formación”.
En esta premisa les ha dado por reunir todo el trabajo que previamente habían “cocinado”, contrastable y contrastado durante años en diferentes clubes de la provincia. Porque, en el fondo, entrenar es eso, formar; compartir. Por eso no descartan promover un banco de ejercicios con otros entrenadores, hacer versiones de su primera publicación o compartir ese trabajo de viva voz. Lo harán este viernes en la Casa del Deporte, a partir de las siete de la tarde, en una presentación promovido por la Fundación Municipal de Deportes.
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