El jugador canario volvió a la que fue su casa y salió ovacionado por la grada del Nuevo José Zorrilla

Joan Francesc Ferreri ‘Rubi’ decidió apostar en el once inicial por dos de sus jugadores canarios, Omar Ramos y Jeffren Suárez. Solo faltó el tercero, el portero, Dani Hernández. Chicharreros los tres, se veían las caras ante el máximo rival del club de su ciudad, una Unión Deportiva Las Palmas que llegaba y abandonó Zorrilla como líder.
Más especial si cabe que para ellos tres fue el encuentro para un canarión, Nauzet Alemán, que retornaba a la que fue su casa durante tres temporadas, en las que defendió la camiseta del Real Valladolid en noventa ocasiones.
Se detuvo a charlar con cada viejo amigo con el que se reencontraba y repartió abrazos por doquier, y fue el último jugador de la UD Las Palmas en abandonar el estadio; en parte, porque, ya que el Pisuerga pasa por Valladolid, se va a quedar a disfrutar del descanso que les ha dado Paco Herrera.
Cuando dejó su lugar sobre el campo a Vicente Gómez –autor del postrero gol del triunfo canario–, en el minuto 75, recibió una cálida ovación de la que fue su afición, algo que definió como “un momento muy bonito”. “Estoy muy contento por volver a Valladolid. Me dieron la oportunidad de jugar en Primera División y salí muy bien de aquí. Siempre estaré agradecido a esta familia”, confirmó en zona mixta.
Allí también hubo momentos para los saludos afectuosos con periodistas o los últimos empleados del club y amigos que quedaban por abandonar el José Zorrilla. Él lo hizo sin sus camisetas de juego, pues regaló una a Jesús Navarro, encargado del mantenimiento de las instalaciones del Real Valladolid, e intercambió otra con Dani Hernández.
Abandonó la que fuera su casa feliz, lógicamente, también por la victoria de su equipo, aunque ahí no quiso hacer distinción. “Lo de menos era el rival. Lo importante era el triunfo contra un rival directo. Sabíamos que si sacábamos algo positivo de aquí, saldríamos reforzados, y lo hemos hecho”, afirmó.
El extremo canario definió al Real Valladolid como “un buen equipo”, que juega “muy bien al fútbol” y al que es “complicado presionar en la salida de balón”. Con todo, los blanquivioletas “llegaron muy bien, pero solo pudieron meter un gol”, para mayor gloria canariona. “Hemos remontado otro partido a base de constancia y de querer ganar durante los noventa minutos. En el calentamiento hablamos entre nosotros de que este tipo de partidos hay que ganarlos si queremos estar arriba. Salimos muy beneficiados”, concluyó. Y luego dio otro abrazo y, entonces sí, se marchó.
