El delantero catalán firma por el filial del Rayo Vallecano tras rescindir con el del Real Valladolid

El catorce de julio de 2014 se hacía oficial la llegada de Sekou Gassama a la disciplina del Real Valladolid, procedente del Almería B, para formar parte, durante las siguientes tres temporadas, de la plantilla del filial blanquivioleta. Seis meses después, el delantero catalán dice adiós a la capital del Pisuerga y se va, en busca de minutos, al filial del Rayo Vallecano.
Fue el cuarto fichaje de verano de un renovado Promesas. Procedente del Almería B, y tras la marcha de Rubén Díaz, llegó Sekou, un delantero que comenzó su andadura en el fútbol como defensa central. Años después, reconvertido en ariete, pasó por las categorías inferiores del FC Barcelona y del Damm hasta que, en el 2013, el Almería se hizo con sus servicios.
Llegó a Valladolid y, en cuanto lo hizo, partió rumbo a Mondariz para ponerse a las órdenes de Rubi y, así, hacer pretemporada con el primer equipo. Tras volver, ya a las órdenes de Rubén de la Barrera, se le pudo ver en los amistosos que disputó el filial blanquivioleta antes de comenzar la Liga, al igual que en el Trofeo Diputación.
En total ha disputado 91 minutos en las veintidós jornadas hasta la fecha, repartidos en siete partidos. El delantero catalán comenzó la Liga jugando tan solo 180 segundos, y vio pasar los partidos desde la grada desde la jornada dos hasta la catorce, en la que saltó al terreno de juego para disputar los últimos instantes del encuentro en el que el Promesas cayó derrotado por 3-4 ante el Racing de Ferrol.
Un última jugada de infarto puso los nervios a flor de piel en ese partido, en la que Sekou se quedó prácticamente solo delante del portero, pero sin llegar a marcar gol, lo que habría supuesto el empate a cuatro en el electrónico. También tuvo minutos en los siguientes dos partidos, ante el filial del Celta y el Marino de Luanco, algo que no volvió a ocurrir hasta la jornada veinte.
En ese partido, un Sekou que tan solo jugó catorce minutos dio la vuelta a un partido que el filial pucelano perdía por cero goles a tres ante el Astorga, y que acabó empatando, merced de los dos tantos del catalán y un golazo de Brian de falta. Pero eso no sirvió para que el delantero saltase al terreno de juego como titular en la siguiente jornada ante el Zamora; algo que Rubén de la Barrera explicó al finalizar el partido, considerando que resolvió el encuentro en ‘jugadas puntuales’.
El pasado fin de semana, ante el Tropezón, el jugador de origen senegalés volvió al rescate de un Promesas que -de nuevo- caía por cero goles a dos en Los Anexos. Provocando un penalti que abrió la lata pucelana, resultó ser, una vez más, imprescindible en la remontada del filial blanquivioleta.
El lunes dijo adiós, y lo hizo con la firme idea de buscar la oportunidad y los minutos que aquí se le negaron. Su nuevo destino será el Rayo Vallecano B, que se encuentra en la antepenúltima posición del Grupo II de Segunda División B.
