El conjunto de Diego Macón cae por cuatro a uno contra el Salmantino y se aleja un punto más de la salvación
Dicen por ahí que el Villa de Simancas es indigno; que no compite, que no merece la Tercera División. Que su nivel ha de invitar a la reflexión por parte de la Federación de Castilla y León de Fútbol, como si esta tuviera culpa. O como si la tuviera el propio Simancas, y no aquellos que no defienden, invierten y ‘viven’ el fútbol modesto.
La crisis no la ha provocado la Federación. Ni tampoco el Simancas. No es este sitio para decir dónde debe arreglarse la Tercera, ni quién ha provocado la actual coyuntura económica que ha barrido y dejado como un solar el balompié regional.
No es esta una página web especilizada en la Tercera División. Tampoco es quien escribe el que más sabe de la categoría. Pero este portal conoce lo suficiente del fútbol castellano-leonés como para acertar a decir que sí, que en efecto, que el nivel de la Tercera es muy bajo. Otrora había sueldos, y sueldos altos que hoy ni tan siquiera en la Segunda División B muchos clubes se pueden permitir.
La cosa es que sí, que el nivel del Simancas no es muy alto. El del Salmantino, a pesar del cuatro a uno que endosó a los franjiblancos en su último encuentro, tampoco es el de la Brasil de los 70. Aunque pobres, se presupone una honradez en los dos clubes. En lo aquí conocido, el Villa de Simancas, se sabe esa honradez que existe.
Negar que lo más probable es que descienda sería engañar y engañarse, aunque aún tienen dieciséis jornadas por delante para lograr el más difícil todavía, tiempo suficiente para recuperar la desventaja actual de seis puntos con respecto a la Cebrereña. Quizá no lo logren, pero igual que esto ha de ser reconocido, se debe reconocer que nadie le ha regalado nada.
Llegados a este punto, la goleada recibida en Salamanca casi da igual; es una más. Los charros marcaron pronto dos goles, luego se relajaron, el Simancas intentó meterse de nuevo, luego otra vez el Salmantino apretó el acelerador y acabó de despegar, se puso cuatro a cero y a los de Diego Macón no les quedó otra que intentar maquillar el resultado, algo que hizo Rodri a falta de menos de diez minutos para el final.
Otro día en la oficina. En la oficina de los pobres. De los pobres pero honrados. Que seguirán luchando hasta que pierdan toda opción, porque mientras hay vida hay esperanza. Y si no puede ser, pues no será. Pero seguirán siendo honrados, porque, aunque malos, nadie les habrá regalado nada, como hasta ahora. Y solo por eso merecen respeto, señor anónimo de Revista Salas Bajas.
CF Salmantino: Juan Berlana, Sito Cruz (Héctor Grijalba, min. 74), Gallego, Juan de la Nava, Ibai, Ruby, Toni Miguel (Tejedor, min. 70), Mario Sopale (Caramelo, min. 59), Iñaki, Diego Ortiz y Juanan.
CD Villa de Simancas: Guzón, Peke (Kiko, min. 59), Álex, Jorge, Mongil, Pablo (Manu, min. 66), Alvarito, Mateo, Cristian (Guille, min. 46), Gallego y Rodri.
Goles: 1-0, min. 6: Juanan. 2-0, min. 8: Iñaki. 3-0, min. 69: Gallego. 4-0, min. 74: Tejedor. 4-1, min 82: Rodri.