Dani Hernández se fue a Tenerife a buscar los minutos que en Valladolid no tenía y parece que, de momento, los ha encontrado

Mientras media España estaba viendo el Atlético de Madrid – Real Madrid de Copa del Rey, el Real Valladolid anunció a través de su página web y sus redes sociales que Dani Hernández dejaba de ser jugador blanquivioleta. Nadie se extrañó, puesto que era una noticia que tarde o temprano se haría efectiva; lo que sí llamó la atención es que se llegara a un acuerdo para rescindir el contrato sin tener otro guardameta firmado.
Ese quince de enero por la tarde, casi noche, el venezolano ‘compró’ su carta de libertad para poner rumbo a las Islas Canarias. Quería volver a Tenerife a toda costa, puesto que el equipo chicharrero le ofrecía lo que aquí no tenía: minutos. Como todo futbolista, el objetivo es jugar los máximos partidos posibles, puesto que es su trabajo. Pero el caso de un internacional se vuelve más complejo si de esos minutos de competición regular depende su llamada o no con su respectiva selección.
Dani Hernández quería jugar, puesto que de sus actuaciones en Valladolid dependía continuar defendiendo los colores de la vinotinto, como siempre ha hecho y cuyo equipo para él ha sido una prioridad en todo momento.
Cabe recordar, porque ahí están las estadísticas, que nunca ha conseguido hacer una temporada regular. Su titularidad se ha ido alternando con la suplencia. En Valladolid, su máximo registro se sitúa en 2.160 minutos en la temporada 2011/12, con veinticuatro partidos como guardameta de inicio.
Pero ahora todo eso ya está olvidado. Cogió sus maletas y se aferró como nadie al dicho ‘año nuevo, vida nueva’. Y si el día quince de enero firmó la rescisión de contrato en Valladolid, el día dieciocho ya estaba defendiendo sobre el césped del Heliodoro Rodríguez López la camiseta del Tenerife.
Desde entonces, Dani Hernández está siendo titular indiscutible. Ha jugado los cinco partidos disputados hasta el momento desde el día de su vínculo con el equipo tinerfeño. Eso supone alrededor de 450 minutos en un mes. Sí que es cierto que aún no ha podido celebrar ninguna victoria con su nuevo conjunto.
El día de su debut se enfrentó al Numancia y el resultado final fue de 0-0. La semana siguiente, el Tenerife recibió a la Ponferradina y el conjunto berciano se llevó el partido por la mínima. Posteriormente, los canarios viajaron al Carlos Belmonte de Albacete y los locales vencieron por 3-2. Un Girona a la alza logró sacar los tres puntos del Heliodoro con un rácano 0-1; y, la semana pasada, el Mirandés le puso las cosas difíciles y el Tenerife solo pudo sacar un punto en Anduva.
Por ello, desde que Dani Hernández defiende la portería tinerfeña, el conjunto dirigido por Raúl Agné ha sacado dos puntos de los quince posibles. Un bagaje que le coloca ahora mismo en los puestos de descenso con tan solo veinticinco puntos.
Entre otras cosas, por mejorar estos resultados y por lucirse ante su exequipo, Dani Hernández quiere cuajar un buen encuentro el próximo domingo. Él sabe, y así lo ha confirmado, que será un partido especial porque hace muy poco vestía la blanquivioleta. Será un reencuentro con sus no tan antiguos compañeros y con el equipo que dejó por cumplir su deseo, que no es otro que sumar minutos como titular de la Liga Adelante.
