Gaizka Garitano da por bueno el trabajo realizado en el “duro partido” contra el Pontevedra y reconoce estar contento, también, con los jugadores del filial a los que ha ido “metiendo minutos”

Para tratarse de un partido de pretemporada, puede decirse que el encuentro contra el Pontevedra fue una exigente prueba. Exigente y buena, teniendo en cuenta las consignas de Gaika Garitano, puesto que no hay nada mejor para testar intensidad que responderle con la misma moneda. Y el equipo que entrena Luisito, próximamente rival del Real Valladolid Promesas ya durante la temporada, sin duda lo hizo.
Así reconoció haber visto el amistoso el entrenador blanquivioleta, como un “partido duro, sobre todo durante el primer tiempo”, pero que sirvió para ver al equipo que él quiere, que se caracterice “por ser defensivamente muy ordenado y que encaje pocos goles”. Fue así por esa resistencia granate, porque después de un tramo inicial a merced del rival, los locales se vinieron arriba y trenzaron bien más de una vez.
“En el primer tiempo no hemos estado bien; hemos llevado mucho la pelota. Cuando hemos empezado a jugar a dos toques hemos circulado mucho mejor, pero estuvimos espesos con balón. Creo que pesaban las piernas del trabajo de estos días, pero pocas conclusiones se pueden sacar; que el equipo ha competido bien, que no hay lesionados y que hemos sumado minutos. Estoy contento”, afirmó.
De nuevo, esto era lo más importante: acumular carga competitiva sin que las piernas sufran en exceso. Y que a partir de ahí se vayan viendo retazos de lo que el míster quiere que a la larga sea la impronta que defina al conjunto. “Hemos estado ordenados y encajamos pocas ocasiones. En el segundo tiempo nos hemos soltado y hemos hecho muchísimas ocasiones de gol. Desde el primer día se ha visto que el equipo tiene intensidad en la presión y que es competidor. Si para algo han servido estos tres partidos es para ver que el equipo va y va de verdad“, ponderó Garitano.
Al descanso, el vizcaíno realizó cuatro cambios. Sin embargo, descartó que fuera porque no le gustaba lo que vio hasta ese momento. “Era el plan. En pretemporada, no cambiamos ni por el resultado ni porque estemos mejor o peor. Teníamos pensada una serie de minutos para algunos jugadores”, confirmó, y tal y como lo había dispuesto lo hizo.
Una vez concluida la concentración en Galicia, es hora de volver a casa y seguir perfilando el plantel que comenzará a competir ante el Córdoba. Claro está, faltan varios refuerzos por llegar, hasta seis. ¿Seis? Sí, seis, puesto que ahora mismo hay catorce jugadores con ficha del primer equipo y Garitano fue claro: “La plantilla va a ser de veinte jugadores”.
En este sentido, el stage en Mondariz y los días previos han servido “para ir viendo” a los jugadores del Promesas. “Les hemos ido metiendo minutos y hemos estado valorando quiénes nos van a ayudar. La idea es clara: plantilla corta y que los chavales ayuden. Cuando necesitemos echar mano lo haremos, y lo vamos a tener que hacer, porque si hay dieciocho convocados, cuando tengamos lesiones vamos a tener que tirar de algunos. Y hay algunos que están trabajando bien“, concluyó.
