El Real Valladolid Promesas buscará este sábado contra el Cerceda el primer triunfo a domicilio, que le serviría como impulso en la carrera por salvarse
La necesidad del Real Valladolid Promesas lleva siendo apremiante tantas semanas que la palabra final carece de contenido a estas alturas. Cierto es, también porque lo de este fin de semana no lo es en sentido estricto; no ganar no sería morir. Ganar al Cerceda, en cambio, sería otro soplo de vida que se sumaría a la victoria ante el Fabril y que si bien no sacaría al filial del descenso, le insuflaría de moral y podría acercarle a la salvación.
A cinco puntos de ella, y a uno menos del play-out, el conjunto de Miguel Rivera buscará lograr en O Roxo este sábado a partir de las 16:45 horas el que sería la primer triunfo de la temporada fuera de casa contra un rival directo, que se encuentra hundido en la última posición con siete unidades menos –dieciocho– que los blanquivioletas y que consiguió sus cuatro victorias en las cinco primeras jornadas. De hecho, desde el dieciséis de septiembre, no ha vuelto a ganar.
Por lo tanto, parece el día para que el Real Valladolid B sume un triunfo muy necesario, que supondría el segundo consecutivo, algo que no se consigue desde el mes de diciembre, cuando se encadenaron sendos triunfos contra el Racing de Ferrol y la Gimnástica Segoviana en Los Anexos. Sería la prueba de que no solo como locales los vallisoletanos son capaces de vencer y confirmaría las opciones que que quedan para los diez últimos partidos.
En esta ocasión Rivera tendrá de nuevo varias bajas, las de Alvarado y Mario, sancionados (el último con dos encuentros sin poder participar por su expulsión ante el Fabril y por quedarse luego junto a la bocana de vestuarios) y las de los lesionados Dani Vega y Miguel. Al menos, y después de que tuvieran que ser sustituidos el domingo pasado con problemas físicos, Apa y Luis Suárez podrán estar, como Miguel Marí, que vuelve después de cumplir ciclo de amonestaciones.
La convocatoria de dieciocho jugadores la componen los siguientes hombres: Dennis, Guille, Apa, Moi, Sali, Cobo, Raúl Navarro, Carrascal, Corral, Velásquez, Mari, Samanes, Javi Pérez, Antonio Domínguez, Boselli, Mayoral, Luis Suárez y Becerra. La duda con respecto al once podría estar, con todo en el acompañante de Sali en el centro de la zaga, siendo Velásquez la opción más natural, pero no la única.