Después de doblegar al Xerez en casa, el Real Valladolid continuará compitiendo este mes de noviembre ante conjuntos presumiblemente de inferior nivel.
El mes de octubre deparó una serie de compromisos ligueros nada fáciles para el Real Valladolid, si bien el conjunto de Djukic supo saca provecho de la mayoría de ellos. En noviembre, sin embargo, la retahíla de equipos con los que los blanquivioletas tienen que verse las caras son, a priori, conjuntos más asequibles.
Sobre el papel, el Huesca no tiene el nivel del Elche, el Villarreal B no alcanza el del Celta y el Cartagena, pese a que querría estar más arriba, no es Las Palmas. Ahora mismo, todos ellos son equipos en descenso o cercanos a los puestos de peligro después de su mal inicio de campaña. Lo mismo ocurría con el Xerez, rival la jornada pasada, que, pese a tener en sus filas a jugadores de calidad, no ha firmado el comienzo ansiado y se aloja en la parte media-baja de la clasificación.
El próximo rival de los pucelanos es un adormilado Huesca, que recibe al Valladolid como farolillo rojo. Desde la salida del vallisoletano Onésimo Sánchez del banquillo oscense, las cosas se han complicado para los azulgranas. En este caso, el afamado aforismo de ‘’nuevo entrenador, victoria segura” no se ha cumplido, y tras la destitución del imberbe Ángel Royo tras sólo seis jornadas disputadas, llegó a principios de octubre Quique Hérnandez, con quienes los oscenses tampoco han sabido salir del oscuro pozo.
Con sólo seis puntos en su casillero, han pasado a ocupar la última plaza de la categoría de plata la pasada jornada, después de ser rebasados por el Nàstic de Tarragona. Ni la veteranía de Camacho ni el olfato de Tariq han propiciado que el Huesca respire aire poco cargado, y sigue sin disipar las dudas sembradas en el inicio de campaña.
Similar es el caso del Cartagena, un equipo curtido en mil batallas y que hasta hace nada luchaba por su hueco en la parte alta de la tabla. Ha firmado un pésimo comienzo, ocupando el puesto de colista hasta hace escasamente dos jornadas. En ese momento parecía remontar el vuelo gracias a los triunfos ante el Girona y Deportivo –en el partido correspondiente a la primera jornada-, casualmente ambos fuera de casa, pero no ha sabido mantener la buena racha.
Para su desgracia, consiguió todo un récord de partidos sin puntuar, pues hasta la jornada ocho no fue capaz de abrir el casillero. Fue en el encuentro frente al Nàstic, saldado con empate a cero, mismo resultado obtenido ante el Córdoba. Los dos puntos más con los que cuentan respecto al equipo de Quique Hernández, próximo rival blanquivioleta, les permiten colocarse en el antepenúltimo puesto.
Similar ha sido el caso del Cartagena, tras el cambio del alma máter del conjunto albinegro. El Efesé decidió renovar aires cuatro semanas después de comenzar la Liga y cambió al ocupante de su banquillo, Paco López, por otro López, este de nombre Javi, debido a los malos resultados cosechados entre los que el triunfo no tenía cabida.
No tan malo es el momento del Villarreal B, aunque entre sus estadísticas no abundan los resultados abultados. Sin haber cambiado de entrenador, su mayor problema se centra en los escasos partidos ganados.
El filial amarillo cuenta casi con los mismos números a domicilio que en casa, siendo por la mínima mejores en el Mini, hecho que le ha llevado a ocupar la décimo séptima plaza.
En cualquier caso, aunque principalmente el Real Valladolid sea el gran favorito ante estos rivales, es necesario no confiarse para evitar el posible ‘efecto aspirina’ que pueda provocar en sus próximos contendientes, tal y como ha sido tónica general en las últimas temporadas por parte de los blanquivioletas.
A domicilio, el sábado ante el Huesca, si se evita ese exceso de confianza, puede prolongarse la sequía de los azulgranas en El Alcoraz –no han ganado ningún partido ante su afición- y continuar dentro de dos en el Cartagonova con la buena senda a domicilio -el Cartagena sólo ha logrado en lo que va de temporada un punto en su propio terreno-. Con templanza, en casa, el objetivo mantener la buena racha en Zorrilla frente al filial amarillo, quien no ha sido capaz de sumar fuera de su casa más que cuatro puntos hasta el momento.