Como un país que no tiene aeropuerto propio, puede convertirse en uno de los países que encabezan el ranking de mayor riqueza. Sólo por detrás de Ciudad del Vaticano, Mónaco y San Marino, Liechtenstein ha hecho de la escasez de población, una virtud. Con una población de entorno los 40.000 habitantes según los datos del 2024, este estado tan pequeño ha conseguido hacer de un entorno especial pero con escasez de población, uno de los lugares donde mayor calidad de vida podemos encontrar en la actualidad en toda Europa. Caracterizado por su paisaje montañoso. Este micro-estado presume de ser uno de los sitios favoritos para practicar algunos de los deportes de invierno más importantes. Además, tiene una característica muy peculiar y es que es uno de los dos únicos países del mundo que requiere cruzar dos fronteras como mínimo para llegar al mar. Sólo Uzbekistán padece lo mismo.
Curiosamente llama la atención que al ser un sitio tan demandado para visitar por todo lo comentado anteriormente, tenemos que buscarnos las habichuelas para poder acceder al país. Concretamente, si decidimos volar en avión, es necesario saber que antes tendrás que ir, bien a Suiza o bien a Alemania. Dos alternativas para poder acceder a un país que dada su falta su tamaño tan pequeño, no considera rentable tener un aeropuerto propio.
Las alternativas para acceder a Liechtenstein sin aeropuerto
Zurich, a más de 130 kilómetros, o Friedrichshafen a algo menos de 100. Estas son las únicas dos alternativas que tenemos para ir en avión al cuarto país más pequeño de Europa. Dos vías que pueden hacer que el acceso sea un poco más factible. Otra opción, aunque también igual de compleja es hacerlo mediante conexiones ferroviarias. Si bien, sólo existen unas pocas paradas entre Feldkirch, en Austria y Buchs, en Suiza. Todo tiene una explicación lógica. Y es que este micro-estado no tiene la necesidad de vivir del sector turístico. Precisamente su economía en gran parte se sustenta gracias a los sectores financieros e industriales.
Un estilo de vida muy alto
Considerado durante mucho tiempo como un paraíso fiscal, eso tiene relación directa con que sea un estado con una calidad de vida alta. Todo en relación a su renta per cápita, la cual es una de las más altas de toda Europa. Allí además, se presume de una baja deuda pública y una tasa de desempleo mucho más baja aún. Aún así, pese a que no depende estrictamente del turismo, son muchos los que se animan cada año a la aventura de visitar este país tan lujoso. En él podemos visitar, más allá de sus paisajes excepcionales, debemos dedicar un tiempo solamente a visitar los viñedos del valle del Rin, las rutas de senderismo de Malbun y el castillo de Vaduz, situado como su nombre indica, en la capital del país.
En cuanto al tema económico, destaca su independencia del euro. Concretamente, allí la moneda oficial son los francos suizos. En comparación cada franco equivale a 1,06 euros, por lo que la diferencia no es notable en este aspecto. Donde sí lo es es en su sueldo medio. Allí, la media alrededor está rondando los 6.000 euros mensuales, o 85.000 francos suizos anuales. Por supuesto, dependiendo del sector al que nos dediquemos. Por ejemplo, los sectores financieros y de alta tecnología tienen un sueldo medio incluso más alto. Lo mismo ocurre con los médicos. Además, allí se premia a los trabajadores más veteranos o lo que es lo mismo, a los más experimentados.
En definitiva, un sitio excepcional que pese a su falta de población, tiene todas las facilidades del mundo, sintiéndose una de las mayores potencias en cuanto al sector económico y estilo de vida, independientemente de no tener aeropuerto.
 
			