La vuelta al cole puede suponer un dolor de cabeza más que evidente para muchas familias. Lo cierto es que los gastos derivados de la escolarización, año a año, supone un gran porcentaje de los sueldos de padres y madres al comienzo del curso escolar, siendo esto, obviamente, algo de lo que preocuparse de manera clara en estos meses de regreso a las aulas. Es por eso que muchos padres y madres ya se las ingenian para encontrar vías de ahorro cada año y aliviar, de manera clara, el golpe de que sus hijos e hijas deban volver al colegio con nuevos y caros materiales.
Hay que matizar que esto no es culpa de una mala gestión de las familias, puesto que el encarecimiento de la vuelta al cole parece arrastrar, año a año, nuevas realidades que dan un contexto complejo a las causas de este fenómeno. Entre los más llamativos, obviamente se plantea que puedan ser la inflación y la pérdida de poder adquisitivo que presionan actualmente a muchos de los hogares.
Ideas para ahorrar en la vuelta al cole
Los cálculos de la vuelta al cole 2025 son llamativos. Se estima que cada familia deberá destinar, de media, un mínimo de 400€ por hijo, lo que se complica si las familias deberán encarar una vuelta a las aulas para varios hijos e hijas. Una situación muy difícil de asumir con los materiales más típicos, como libros de texto, cuadernos, consumibles, etc. y que, con toda lógica, se complica frente a necesidades extra como los uniformes, las actividades extraescolares o dispositivos electrónicos. Es por eso que se abren algunas posibilidades y consejos a seguir para sobrevivir a la vuelta al cole:
- Reutilización de uniformes escolares y mochilas.
- Intercambio de material escolar entre familias o a través de escuelas, asociaciones e, incluso, aplicaciones.
- Compra de material de segunda mano en plataformas digitales, mercadillos y ofertas a través de redes sociales.
- Planificación anticipada de materiales necesarios y aprovechamiento de ofertas fuera de la campaña de ‘vuelta al cole’.
- Aplazamientos de los pagos, financiación o gestión del gasto mes a mes.
Todos estos consejos, unidos a una buena gestión de los materiales, pueden reforzar una vuelta al cole menos dura para padres y madres que, cada año, ven como parte de sus ingresos deben ser destinados, de manera inexorable, al nuevo curso escolar. Un ejercicio de ingenio que, con un poco de perspicacia, puede ayudar a las propias familias y también a un mundo más responsable en cuanto al consumo.
Un cambio de mentalidad evidente
Esto supone que las familias persigan ahorrar en cada ocasión, pues cada oportunidad cuenta y se puede convertir en una estrategia de supervivencia clave, por lo que es una manera de regatear la situación en la que se encuentran muchas familias que, por cubrir todos los gastos derivados de la educación de sus hijos, se ven obligados a sacrificar actividades de ocio en base a la prioridad imperante de los gastos escolares.
Aunque hay redes de apoyo que siguen ayudando a paliar estas situaciones, a través de campañas de solidaridad, ayudas y cooperación, mediante bancos de material, donaciones, o campañas de ayuda para familias en riesgo de vulnerabilidad, existe también una red de apoyo clave en la comunidad, siendo pilares esenciales los ayuntamientos, los centros cívicos e incluso instituciones sin ánimo de lucro y religiosas.
Hay que decir que, algo que antes se podía ver como un estigma, como el uso de materiales de segunda mano o los trueques, hoy se normaliza por la necesidad actual y el cambio de mentalidad cultural hacia situaciones menos agresivas en cuanto al consumo. Todo lo relacionado con abordar la situación con hábitos de consumo menos nocivos o que puedan fomentar una mejor realidad para las familias afectadas puede suponer, sin duda, un gran paso para muchas familias, que podrán asumir la vuelta al cole sin que sea un suplicio.
