A la baja de Alcatraz, en Colombia, se le une la de Rukavina, que recibió un fuerte golpe en la sesión del lunes que le mantiene entre algodones.
Todavía no ha comenzado el curso y Juan Ignacio Martínez tendrá que afrontar un primer contratiempo con el consiguiente invento que lo solvente. El consuelo es, precisamente, que el problema no se ha dado inmersos en competición. Y, por lo tanto, no será serio. Pero, aun así, se verá obligado a ‘parchear’ el lateral derecho en el partido que su equipo disputa este miércoles ante el Cagliari.
Si primero se confirmó la baja de Alcatraz, que no viajó por tener que desplazarse a Colombia para solucionar unos trámites burocráticos, esta misma mañana se ha confirmado la baja de Toni Rukavina, quien, a pesar de haberse entrenado con el resto de sus compañeros en la sesión matutina, no se encuentra en condiciones de disponer de minutos en Olbia, en Cerdeña.
El lateral derecho serbio arrastra unas molestias provocadas por un fuerte golpe producido en el entrenamiento del lunes, problema que, aunque no reviste gravedad, sí invita a mostrar precaución a diez días vista del inicio de competición. Aunque se espera que pueda estar en el partido del sábado ante Osasuna, por lo pronto, no jugará en Italia, obligando a JIM a tirar de inventiva para sustituirle.
Dadas sus condiciones, lo normal parece que sería que fuera bien uno de los dos laterales izquierdos o bien un central quien ocupe esa posición. Cabe recordar, empero, que Javier Baraja conoce la posición, toda vez que durante buena parte de su trayectoria ha jugado en la zaga, de manera que no es descartable que el capitán vuelva circunstancialmente a ocupar ese puesto.
Cabe recordar que, además de los dos laterales, son también baja en Cerdeña los lesionados Víctor Pérez y Daniel Larsson y el canterano Quique, por decisión técnica, a quien el club ya ha abierto la puerta de salida, después de la llegada de un Humberto Osorio que no se descarta que debute, a pesar de encontrarse inmerso en un plan de trabajo específico debido a la inactividad que le precede.
