Guzmán destaca en comparecencia pública el buen entorno en el que el Real Valladolid está desarrollando su pretemporada
El entorno. Ay, el entorno. Ese ente abstracto. Tan bueno a veces, tan dañino otras. Tan concreto; tan abierto. Y, para Guzmán, en el caso del Real Valladolid, a día de hoy, tan propicio para el trabajo. Eso se desprende de las declaraciones que vertió este martes en Mondariz, un lugar “perfecto, con unas buenas instalaciones y buen clima” que ayudan, efectivamente, a que todo el grupo esté “muy a gusto”.
Es su caso particular. Lleva pocos días con el grupo, pero el suficiente para detectar que hay “un ambiente muy bueno, muy sano y con gente joven” y que las cosas “se están haciendo muy bien”. En el fondo, para eso es para lo que estas concentraciones sirven, para “intentar meter a los nuevos en esa dinámica”, para apurar la forma al máximo y hacerse a los usos del entrenador, sobre todo si este es nuevo.
Garitano, según el extremo pacense, “tiene las cosas muy claras” y les está “intentando inculcar lo que quiere” de tal modo que el equipo “poco a poco está cogiendo sus conceptos”. Es, dice, “muy exigente y quiere que todo el equipo trabaje”, algo que aprueba al afirmar que “eso es fundamental”.
El atacante aprovechó también la ocasión para valorar el primer encuentro amistoso, el disputado ante el Athletic Club, en el que el Real Valladolid dejó una buena imagen ante un equipo “mucho más rodado”. “Fue difícil, había jugadores que llevábamos tres o cuatro entrenamientos. El resultado era lo de menos, ahora buscamos otra cosa, aunque cuando salgamos al campo intentemos ganar”, como fue el caso.
En el plano individual, “el gol es anecdótico”, pues su meta es “coger la forma” y ponerse a tono “cuanto antes para poco a poco ir a más”. Estos partidos –el siguiente tendrá lugar en A Lagoa, el miércoles, contra el Celta B que entrena Javier Torres Gómez– sirven, en definitiva, “para cargar pilas para la temporada”; de ahí que aunque guste ganar importe menos no hacerlo.
Además; actualmente el equipo anda a la espera de refuerzos. Guzmán Casaseca cree que “estos días” llegarán “compañeros nuevos” y opina que “la dirección deportiva está haciendo muy bien su trabajo”, aunque no profundiza: “Nosotros nos dedicamos a entrenar, a coger la forma cuanto antes”, zanja para terminar.
Sigue el trabajo en A Lagoa
Cuando el extremo extremeño compareció ante los medios desplazados a Mondariz, acumulaba ya dos sesiones de trabajo sobre el césped de A Lagoa. La primera, nada más llegar, con Samuel Llorca, Javi Chica, Álvaro Rubio y Caye Quintana al margen; la segunda, con los tres primeros haciendo trabajo en el gimnasio y el cuarto igual, apartado por unas molestias, aunque sobre el césped.
Si el primero sirvió más para estirar las piernas que para otra cosa, para este segundo entrenamiento Gaizka Garitano y su equipo de trabajo previeron intensos ejercicios de posesión, presión y mecanismos de ataque, antes de desplazarse al río Tea para recibir una sesión de crioterapia natural.
Ya por la tarde, vieron un vídeo con cuestiones técnico-tácticas, como preludio del entreno del miércoles, que a la vez será previo a un nuevo amistoso, el que les enfrentará al Real Club Celta B.