Tanto El Corte Inglés como Mercadona han dado un paso adelante para facilitar las compras a sus clientes. Los consumidores buscan cada vez más una mayor comodidad y rapidez y sobre todo dejar de lado las trabas y los problemas para hacerse con los productos. Estas dos empresas, conscientes de las inquietudes y necesidades de la sociedad, han trabajado para estar preparados para cubrir los nuevos hábitos de los clientes.
Estos dos gigantes sacan están sacando ventaja a sus competidores gracias a la siguiente estrategia de venta. Han asumido más costes para lograr ampliar sus redes de servicio de entregas a domicilio. Con esta fórmula conseguirán llegar a más clientes y obtener un mayor volumen de ventas.
Un aumento del servicio de Mercadona en verano
Con la llegada del verano, El Corte Inglés amplió su red de rutas del servicio de entrega a domicilio para llegar a los diferentes destinos vacacionales de sus clientes. Mercadona, por su parte, también ha incrementado su distribución en España manteniéndose así como la gran referencia en este aspecto en nuestro país.
Clara Lloveres, Country Manager de Shopopop en España, explica la realidad de la época estival: “El verano deja al descubierto una realidad que no se puede seguir ignorando: la entrega a domicilio de muchos comercios no está preparada para picos de demanda ni para adaptarse al consumidor real”.
Por eso, El Corte Inglés ha aumentado a 745 los nuevos códigos postales en los que repartir pedidos a sus clientes. La mala noticia es que este aumento del servicio es temporal, a partir del 31 de agosto se volverá a reducir. La idea es clara, cubrir los destinos vacacionales de sus clientes, para que estos no dejen de comprar en El Corte Inglés y se vayan a otras cadenas de distribución que son competencia como Carrefour, Alcampo o Lidl.
El gran almacén tiene así la posibilidad de repartir en áreas de playa, montaña y en segundas residencias, cubriendo así gran parte del territorio español.
En cuanto a Mercadona, el supermercado valenciano tampoco se ha quedado a atrás y ha reforzado su compromiso con sus clientes llegando a nuevos lugares de España. Ciudades como Palma de Mallorca, Santa Cruz de Tenerife, Girona, La Coruña, Gran Canaria, Tarragona o Alicante han podido disfrutar de como la red de servicio a domicilio se ha expandido llegando a más códigos postales durante este verano. Desde la empresa de la familia Roig, sobre todo destacan la labor de sus “colmenas”: almacenes que se usan exclusivamente para la venta online y que permiten acelerar y potenciar los procesos. Mayor eficiencia y mayor garantía de calidad.
Aldi y Lidl, a la baja
A pesar de que la logística de las principales cadenas de distribución se ha transformado para dejar de estar en un segundo plano y ser actualmente una actividad estratégica clave, algunas de las cadenas tradicionales como Aldi o Lidl no han sabido adaptarse en estos meses de verano.
Estos dos supermercados saturan sus operativas y restringen el servicio solo a días laborales, dejando sin atender a muchos clientes que dependen del ‘delivery’. No invierten en sus canales online y su reparto, esto les perjudica gravemente, siendo un importante hándicap con el que pierden ventas en favor de sus competidores.
Aldi y Lidl no están preparados para el caos que supone el reparto en los meses de verano coincidiendo con las vacaciones de los clientes. Hay una menor disponibilidad de personal en los almacenes y en el reparto; se produce un incremento de población en las zonas turísticas lo que obliga a abrir nuevas rutas de envío, cuentan con horarios limitados que significa no dar servicio ni en festivos ni los fines de semana; y por último, la falta de adaptabilidad geográfica para lograr llegar a todo el mundo.
