La vivienda está adquiriendo un tinte dramático en España, pero no es algo ajeno a otros países del mundo, donde en muchas ciudades los precios empiezan a estar muy lejos de los sueldos de las familias y lo desorbitado de sus subidas obligan a muchos a ingeniárselas para encontrar sitios donde poder vivir a precios más razonables. No solo compartiendo piso, sino recurriendo a espacios muy pequeños o en claro estado de ruina. Una realidad que empieza a ser un problema muy grave que, sin duda, nos preocupa, y mucho, a todos
Ahora bien, a grandes males, grandes remedios. Eso es lo que debió de pensar seguramente Laura Butler en el momento de tomar la decisión que tomó para elegir vivienda. Ah, ¿que no sabes quién es? Pues básicamente es la protagonista de una de las historias más llamativas que te contarán hoy. Y pienso hacerlo yo. Y es que el precio de las viviendas, en venta o alguiler, lleva a soluciones drásticas como la que tomó ella misma, entendiendo que, si la vivienda está a precios de lujo, ella iba a intentar que ese dinero la hiciera, como poco, disfrutar.
Laura Butler es una mujer decidida a cambiar su estilo de vida de manera drástica para poder aprovechar un poco mejor el dinero que le supone pagar una vivienda. Acostumbrada a trabajar sentada delante de un ordenador, en enero de 2025 tomó una decisión extraña: vivir en un crucero. Algo que puede sonar a que la tocó la lotería, pero nada más lejos de la realidad, pues Laura decidió hacerlo para demostrar que puede llegar a ser más barato que pagar una hipoteca o un alquiler mes a mes. Un plan de vida que, de momento, va viento en popa. Y nunca mejor dicho.
Laura Butler, de crucero en crucero hasta 2027
Su planning es sencillo: encadenar un barco y después otro hasta marzo de 2027. Una idea que, de momento no parece incomodarla. A bordo de navíos casi exclusivamente de la compañía Princess Cruise, la señora Butler está documentándolo todo y compartiéndolo con sus seguidores a través de su canal de YouTube, Living On Cruise Control o, en castellano, Viviendo en un crucero.
“Cuando te despiertas, puede que estés en un puerto o en una ciudad nueva, es asombroso”, comenta Butler, que de momento no parece cansada de vivir flotando en los mares del mundo. Pero no todo es diversión, pues Laura Butler argumenta que no es una decisión tomada desde el deseo de aventura o de diversión continua, sino desde un punto de vista económico que ya es muy preocupante. Según Laura Butler, la tarifa mensual general a bordo está cerca de los mil euros, algo que aglutina estancia, comida, entretenimiento y suministros, como en una vivienda en tierra firme.
La clave es verlo todo como un único pago y comparar, pues no va muy lejos de lo que supondría vivir todo eso en casi cualquier ciudad. Y es que el ahorro no es solo monetario, pues al tener la limpieza, la comida y las actividades incluidas, apenas tiene que desgastarse en hacerlo ella, como tendría que ser en su propia casa. “No conozco otra forma de viajar que con un todo incluido”, bromea Butler, que según entiende, aunque hay gastos añadidos, como excursiones o caprichos personales no incluidos, la realidad es que es una realidad muy disfrutable y rentable.
El caso de Laura Butler no es el único, aunque pueda parecer bizarro. Muchos jubilados están optando por vivir flotando sabiendo que sus pensiones pueden darles una vía de descanso y ahorro que no les generaría ese componente social y de diversión y descanso que sí les aporta estar en compañía continua en un ambiente de diversión a flote.
