El jugador del Parquesol festeja el primer triunfo en casa y señala que, ante la decisión “sorprendente” de cambiar de entrenador, “hay que tirar para adelante”
Daniel Nicolás se enfundó el brazalete de capitán este fin de semana en un partido trascendental para su equipo. El Parquesol estaba obligado a ganar al Victoria después de una mala racha de resultados, sin vencer aún en casa, y cuatro días después de anunciarse un cambio de entrenador que dejaba a gran parte del vestuario tocado. Y el objetivo se consiguió “Son fechas que te marcan”, reconoció.
El atacante del conjunto naranja se pasó por los micrófonos de #HacemosCantera en Radio Marca para festejar esa victoria, que aleja a su equipo del descenso. “Era merecido. Veníamos de unos partidos en el que nos condenaba la mala suerte y los fallos puntuales. Pero estos tres puntos nos han dado mucha moral”, explicó.
Esa es la premisa fundamental, según él, para remontar el vuelo. “La clave se encuentra en la motivación. Está claro que hay que mejorar en lo táctico algunas cosas, pero se compite bien, incluso contra los grandes. Solo falta eso”, aseguró.
Para empezar, el vestuario deberá reponerse del todo de la salida de Juan Carlos Gregorio del banquillo, que ha afectado “a algunos jugadores más que a otros”.
“Creo que el cambio no hacía falta, pero es una decisión que respetamos y no nos queda otra que seguir adelante“, expresó Dani, que reconoció que estos tres meses con él había aprendido mucho tácticamente. Aun así, con Alberto Serrano como ocupante del banquillo también se siente cómodo en este comienzo. “Nos mete caña, es una persona que lleva muy bien el grupo”.
Sin duda, su papel será fundamental para que el Parquesol vaya escalando posiciones y se centre en un objetivo ambicioso. “Este año no nos hemos marcado ningún objetivo. Lo primero es salvarnos, creo que lo haremos holgadamente, y creo que una buena meta es quedar entre los cinco primeros“, auguró Dani.
En lo personal, eso sí, tiene claro en qué parte del campo quiere estar. “Soy más efectivo de medio campo para arriba. Bajar a defender no me llama mucho”, bromeó, si bien reconoció que se ha adaptado bien al cambio tras la salida de Manu Olivas de quien, por otra parte, se acordó. “El mejor momento en mi etapa de juvenil fue su despedida, con la remontada de ese día ante el Santa Marta. Fue muy emotivo”, sentenció.
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