La primera plantilla se ejercitó tras el parón navideño para empezar a preparar el partido ante el Celta de Vigo el próximo seis de enero.
La primera plantilla del Real Valladolid volvió al trabajo en doble sesión este domingo después de disfrutar de una semana de vacaciones correspondientes al parón navideño. La matinal se dividió en dos partes: en la primera se analizó un vídeo y en la segunda se basó en el ejercicio físico sobre el césped de Los Anexos. El único ausente fue Manucho ya que se encuentra con Angola para disputar la CAN.
Quien sí estuvo en el José Zorrilla, pero no pudo ejercitarse fue Jaime, por una artritis postraumática en un dedo del pie derecho. Los médicos también están pendientes de la evolución de las respectivas lesiones de Ebert y Rueda. Ambos realizaron carrera continua, pero no tocaron balón. En principio, tanto el central como el extremo están descartados para el partido ante el Celta de Vigo y se espera que vayan entrenando progresivamente para estar a punto ante el Mallorca.
Djukic, que solo piensa en el choque ante los gallegos del próximo día seis, ya está probando con un posible once inicial, en el que los titulares serían Guerra en la punta de ataque, Bueno en la mediapunta, Omar en la izquierda y Larsson en la derecha. El club espera que la Federación confirme la ficha del sueco el próximo dos de enero para que así pueda estar en Balaídos.
En la sesión vespertina, a Rodrigo, Pesca, Lolo y Rubén Peña, habituales jugadores del Promesas a las órdenes del serbio, se les sumaron el central Iván Casado y el centrocampista Alberto Rodríguez, hijo del que fuera lateral del primer equipo, Juan Carlos Rodríguez.
Este lunes el equipo se ejercitará por última vez en 2012. El día uno descansará y volverá a los entrenamientos el dos, día en que disputará un amistoso ante la Cultural en León.