Iván San José, Chuki, ha vuelto por sus fueros. El canterano del Real Valladolid resultó decisivo en la vuelta al camino de las victorias de los blanquivioletas, al marcar un golazo de falta directa que ese golpeo magistral que tantas veces había mostrado en Los Anexos, donde se formó. Después “de dos derrotas y un empate”, notaba el vestuario la “presión” de los resultados y, como dijo en zona mixta al terminar el partido, sabían “que era el día, y más aquí”, afirmó, haciendo una clara referencia a la condición de derbi que tenía el encuentro de El Plantío.
Fue el día del Real Valladolid y de saborear otra vez las mieles de la victoria, y también el día de Valladolid, que en ese duelo castellano volvió a imponerse sobre unos sobreexcitados burgaleses. “Para la afición esto es un plus. El día de la Cultural Leonesa nos fuimos muy jodidos, pero esto nos va a ayudar a llegar a donde queremos estar”, indicó el canterano tras otorgar tres puntos a su equipo y de reivindicar su condición de vallisoletano y de blanquivioleta al celebrar el tanto besándose el escudo y frente una hinchada que festejaba enfervorecida.
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RIIIIIIIING RIIIIIIIING— Real Valladolid C.F. (@realvalladolid) October 12, 2025
Chuki quiere el ascenso
Chuki tuvo que saltar al terreno de juego por unas molestias físicas de Tenés, a quien deseó “que no haya sido nada” lo sentido -aparentemente, muscular-. En varias ocasiones, el vallisoletano dijo estar “muy contento por el equipo y por la afición”, además de mostrar su felicidad por participar en un derbi. “Gusta jugarlos y gusta ganarlos. Ha sido un partidazo”, insistió, un buen rato después de un golpeo que, en cuanto hizo, supo que iba a terminar en gol. “En cuanto he visto salir el balón, sabía que iba a entrar”, confesó ante la Prensa.
Cabe recordar que Chuki abrió también el camino hacia el primer triunfo de la temporada, contra el Ceuta, y que después se lesionó y se tuvo que perder tres partidos. “He vuelto con muchas ganas”, indicó. Tantas que si uno le pregunta por el futuro, dice claramente: “Quiero ascender al equipo. Esta es mi casa”. No es baladí la cuestión, puesto que termina contrato al término de la temporada, aunque, “centrado” en esta, deja el tema en manos de sus agentes, con los que Víctor Orta deberá arreglarse para que un activo tan importante como puede ser siga de blanquivioleta.