El primer gol del extremeño en Primera División le cuesta la categoría al próximo rival del Real Valladolid en su búsqueda de la salvación
Waldo Rubio marcó ante el Athletic Club su primer gol en Primera División, marca de la casa, con una conducción larga y un golpetazo de diestra al palo largo. El atacante extremeño, ascendido al primer equipo después de la lesión de larga duración de Pablo Hervías, ha mostrado una increíble adaptación a la categoría, puesto que el tanto le llegó en su séptimo partido en ella.
Además, sirvió para que el Real Valladolid sumase tres puntos vitales en la carrera por la permanencia, en la que lleva poco tiempo. Antes de esta participó en otra con un cariz semejante como es la del Promesas, al que llegó a prueba en verano, después de que el Córdoba –con quien había debutado en Segunda– no apostara por él. Él lo hizo por Pucela y le salió bien: decisivo, hizo seis goles con el filial antes de empezar a disponer de minutos con Sergio González.
Su gol da vida a los blanquivioletas, y se la quita al Rayo Vallecano, próximo rival del Real Valladolid, ya descendido después de perder esta jornada por cuatro a uno en el Ciutat de València ante un Levante que ya era rival directo de los madrileños por la salvación. Tras caer, y después del resto de resultados –el de Zorrilla el último–, los de Paco Jémez se confirman como primer equipo que pierde la categoría en una Primera División por la cual seguirá pugnando en el Municipal de Vallecas el cuadro vallisoletano.
