Las naranjas serán matemáticamente segundas si igualan el resultado del Atlético ante el Pozuelo. Jugarán ante un Rayo B que dispone de la última bala para ascender

El Parquesol se juega este fin de semana que la última jornada ante el Atlético de Madrid B sea únicamente para disfrutar. Después de aprobar el examen de Primera B, este sábado las naranjas se enfrentan a la prueba para llegar a sobresaliente, y así no tener que ir con apuros a la última convocatoria directa ante las rojiblancas. Las matemáticas son sencillas: deberán igualar o mejorar el resultado que las colchoneras obtengan en duelo frente al Pozuelo.
Eso quiere decir que si el Parquesol vence este sábado al Rayo Vallecano B (16:00 horas) ya estará todo el pescado vendido, pero no va a ser nada fácil por dos principales motivos. El primero de ellos es que, si las rojblancas no consiguen el triunfo se quedarán sin ninguna opción de alcanzar al Madrid B y, por ende, el ascenso a Primera B. Y el segundo y no menos relevante es que lo más probable es que varias jugadoras del primer equipo bajen al filial para echar una mano, lo que hará más complicado el partido.
“No trabajamos pensando en qué jugadoras estarán, sino en el planteamiento que ese equipo lleva haciendo todo el año. Hay que recordar que muchas futbolistas van esta temporada a caballo entre Primera y Segunda”, matiza Rubén Jiménez, que intuye que el partido puede desarrollarse entre dos vertientes. “O le quitamos el balón y tenemos el dominio o jugamos al espacio que ellas dejen al intentar jugarlo”, analiza. Aun así, presiente que el partido va a ser muy bonito.
Además, el equipo está preparado para el reto tal y como afirma también el técnico, que más allá de euforias ve a la plantilla preparada para afrontar el último reto de la temporada. “Hemos respondido bien al parón. Estábamos en una dinámica muy positiva y habría preferido no parar, pero eso no depende de nosotros”, asumió, pero está convencido de que el Parquesol ha alcanzado “un nivel muy alto”, y que la resaca del ascenso les está haciendo crecer.
El conjunto naranja viaja a Vallecas con toda su plantilla y Rubén Jiménez deberá hacer allí dos descartes con el fin de equilibrar al equipo y sacar un resultado positivo que se viene complicando las últimas temporadas. La pasada campaña cayeron por cuatro a uno en las primeras jornadas y hace dos, por tres a cero. Sin embargo, el precedente más cercano es el de hace unos meses cuando el Parquesol consiguió una de esas victorias in extremis en el descuento gracias a un gol de Carla en un saque de esquina.
