Nacho y Antoñito hacen autocrítica tras la dura derrota del Real Valladolid ante el CD Leganés
Como no podía ser de otra forma, el vestuario del Real Valladolid se mostraba dolido al término del encuentro ante el CD Leganés por la dura derrota sufrida, sentimiento que verbalizaron posteriormente ante los medios de comunicación Antoñito y Nacho en zona mixta.
Ante la ausencia del lesionado Javi Moyano, Antoñito Regal ocupó el lateral derecho durante los noventa minutos y fue parte de esa “dolorosa derrota”, como la definió después. “Con balón hemos estado bien, pero en el balón parado han sido mejores que nosotros. Sabíamos que podían hacernos daño por cómo plantearían el partido y desde el principio nos ha faltado una pizca de suerte”, explicaba.
En su opinión, Óscar Plano o Verde tuvieron alguna posibilidad de dañar a la zaga pepinera, al tiempo que llegaron bien “por bandas con algún centro” que no pasó a mayores; no lo suficiente para discutir el triunfo al ‘Lega’. “Ha sido el partido tonto del año. Esperamos recuperarnos de cara al miércoles y al domingo. Tenemos que aceptarlo y mirar hacia adelante porque estábamos haciendo las cosas bien”, recordó el andaluz.
Pese a la evidente molestia generada por el tropiezo, el lateral indicó que el vestuario es optimista de cara a revertir esta situación y no negó a Sergio González, que minutos antes en rueda de prensa había hablado de una posible falta de realismo en las últimas jornadas, de circunstancias que se han ido perdiendo últimamente. “Si el míster dice eso, solo nos queda aprender”, aseveró Antoñito.
Por su parte, Nacho, que terminó el envite con molestias por culpa de un golpe que sufrió, habló también de un “vestuario dolido” por una derrota que no esperaba y que tiene que ser “un punto de inflexión”. “Debemos recomponernos de cara al miércoles. Tenemos la suerte de que el fútbol nos da una oportunidad rápido para recuperarnos y tratar de pasar la eliminatoria”, alegó.
El carrilero zurdo incidió mucho en la necesidad de mantener la intensidad y en el toque de atención que supone este mazazo de cara a volver a sentir y a jugar como el equipo lo venía haciendo. “Nos tiene que valer para darnos cuenta de que no podemos bajar el nivel en ningún partido. No hay partido fácil, y si bajas un poco el ritmo, te golpean en la cara“, dijo, como en su opinión hizo el Leganés. No obstante, no todo es malo, pues a su modo de ver “desde la primera jornada” el Real Valladolid mostró ser “un bloque fuerte” que tratará de recomponerse y volver a tener las cosas claras después de la goleada sufrida.