Los de Javi Baraja se llevaron el cuarto test de pretemporada ante los leoneses en un choque disputado en el que cualquiera pudo vencer
El Real Valladolid Promesas sigue creciendo en pretemporada. Los blanquivioletas se llevaron el cuarto partido de pretemporada ante un rival correoso, la Cultural y Deportiva Leonesa, que por momentos llevó la iniciativa del mismo y puso en aprietos al filial.
La intensidad con la que ambos conjuntos saltaron al césped se notó desde los primeros compases. Víctor García, en el costado derecho, aprovechó un balón a la espalda de los defensores leoneses para dar el primer susto, aunque la pelota se estrelló en el lateral de la red. Al golpe respondió rápidamente Augusto, que obligó a Samu a intervenir.
Los de Baraja trataron de llevar el peso del partido, pero la Cultu no cedió el control del choque. Cumplido el primer cuarto de hora, Óscar intentó el control de tacón ante los centrales, que no le salió, en una acción en la que el blanquivioleta se hubiera plantado solo ante Leandro. Acto seguido, Kawaya robó el cuero tras una falta botada por Socorro y armó la contra, aunque, encimado por los centrales, terminó disparando desviado.
Con el paso de los minutos, los de Aira se fueron animando y pisando con más intensidad el área rival. Así, Jaime se erigió como salvador del filial, al desbaratar una rápida contra en línea de gol y, en la siguiente, blocar la incursión de Dioni por banda izquierda.
Con todo, fueron los de Javi Baraja los que se adelantaron en el marcador. Desde el centro del campo, Iker condujo hasta que cayó derribado. El balón muerto lo cazó Socorro y, tras dos recortes, el rechazo le cayó a Óscar, que no dudó a la hora de mandar el balón al fondo de la red.
En la segunda mitad, y como viene siendo habitual en los choques de pretemporada, el Promesas formó con un once totalmente remozado en el que Jaime fue el único que continuó con respecto al primer tiempo. Pronto aprovechó la Cultu los desajustes, especialmente defensivos, y Dioni, tras una asistencia de Kawaya, empató la contienda cuando apenas se habían disputado diez minutos tras la reanudación.
Sin bajar los brazos, los blanquivioletas buscaron el gol, pese a que los leones apretaban más. Soberón anticipó lo que a la postre sería el gol de la victoria con un disparo flojo, que el guardameta atajó sin problemas, tras una buena combinación del cántabro con Dali y Marcos André.
Si en la primera mitad Jaime había sido el encargado de desbaratar las ocasiones más claras, en el segundo acto el protagonismo lo tuvo Gaizka. Con una espectacular estirada primero y un despeje con la puntera, el cancerbero salvó los muebles y evitó la derrota.
Un trabajo que redondeó Soberón a falta de diez minutos para el final en un rápido cuatro contra dos. Charaf condujo con rapidez hasta abrir a Dali, que progresó por banda derecha y la puso en el segundo palo, donde el de Unquera solo tuvo que empujarla.
El gol dio alas a los de Baraja, que se volcaron en busca del tercero, mientras que los de Aira se replegaban a la espera de una contra que les diera la igualada. Lucas tuvo que volar para atajar la última oportunidad del Promesas, que venció y, sobre manera, convenció, demostrando que el trabajo de la pretemporada comienza a dar sus frutos.
Real Valladolid Promesas: Samu Pérez; Iker, Jaime Sanchez, Cerro, Corral; Víctor García, Kike Pérez, Oriol Rey, Víctor Socorro; Miguel y Óscar. En la segunda mitad jugaron Gaizka; Apa, Jaime Sánchez, Mario Robles, Álex Pérez; Doncel (Kuki, min. 72), Segura, Charaf, Dali; Soberón y Marcos André.
Cultural y Deportiva Leonesa: Leandro; Juan, Iván González, Virgil, Marcos; Alfonso, Percan, Menudo, Kawaya; Augusto y Dioni. También jugaron Luque, Soler, Lucas, Rodri, Estelles, Sergio Marcos, Aaron, Amadou Diarra, Jorge Saez y Antonio López.
Goles: 1-0, min. 37: Óscar; 1-1, min. 53: Dioni; 2-1, min. 79: Soberón.
Árbitro: De la Fuente Ramos, del colegio castellano y leonés, asistido en las bandas por Gómez Díez y Martín Álvarez. Amonestó a los locales Kike y Mario Robles.
Incidencias: Cuarto amistoso de la pretemporada del Promesas, disputado en el Municipal Juan Carlos Navarro ante unos trescientos espectadores.