El Sporting de Gijón se hizo con el XIV Trofeo Memorial Ramón Losada que se disputó en el campo de la Veigona (Luarca) tras doblegar al Real Valladolid. El entrenador pucelano volvió a alinear dos onces en cada parte. El equipo de la primera, formada por Jaime, Barragán, Rueda, Valiente, Peña, Rubio, Jorge Alonso, Sisi, Óscar, Marquitos y Bueno, ejerció bien en la presión y no dejó espacios para que los de Preciado estuvieran acertados de cara a portería.
Una serie de avisos al área rival hasta que, al filo del descanso, Botía cometió una falta sobre Barragán que se convirtió en pena máxima. El encargado de transformar el penalti fue Alberto Bueno, quien marco el primer tanto del partido.
En la reanudación, Djukic alineó otro once formado por Salcedo, Felipe, Baraja, Juanito, Jordi, Razak, Nafti, Víctor Pérez, Jofre, Aquino y el único jugador que jugó los 90 minutos Bueno, desplazado a la banda derecha.
El nuevo equipo no supo anular como el primero al Sporting, que reaccionó con presteza y en los primeros minutos Carmelo puso las tablas en el luminoso tras una falta botada al borde del área que se introdujo por la escuadra izquierda de Salcedo.
No obstante, el despertar rojiblanco no acusó en exceso al nuevo equipo, pues escasos minutos después un disparo largo de Juanito hizo que Aquino acertará a marcar el gol que de nuevo pondría por delante a los pucelanos.
Poco duró la ventaja, ya que el senegalés Mendy ponía el 2-2 en el marcador al disparar completamente solo dentro del área tras el desvío de un córner. Cuando se rozaba el final del partido, ambos conjuntos buscaban el gol de la victoria que podría decantarse por cualquier equipo, con ocasiones de Bueno, en una gran jugada individual, y Barral.
Pero la balanza se decantó por el Sporting. Sangoy, asitido por Novo, superó a Salcedo con un derechazo que previamente golpeó en el poste para alojarse después en el fondo de las mallas. De esta forma, el Sporting se alzó con el Trofeo, aunque el Valladolid dejó buenas sensaciones que se pueden ir puliendo.