Guillermo Almada pedía en la previa el apoyo de la afición del Real Valladolid antes del último partido del 2025. Ahora bien, debía ser reccíproco. “Debemos darle cosas a nuestra afición, sobre todo triunfos”, dijo el charrúa. Sin embargo, nada más alejado de la realidad. El equipo hizo un mal partido, y en la segunda mitad no solo perdió el poco fútbol que demostró en la primera, sino que vio cómo el Andorra lo superó con un gol en los últimos compases.
El Pucela se encontró cómodo al inicio del partido, buscando línea de fondo y oportunidades para sacar centros. Los de Almada entraron bien al césped con ese plan y gozaron de alguna que otra oportunidad tras progresar por ambas bandas. La primera ocasión estuvo en la cabeza de Stanko Juric, Alejo llegó sin oposición al balón y puso un centro a media altura del cual era difícil sacar petróleo, pero el croata casi lo consigue. Sacó un buen testarazo, pero el balón acabó en la cara exterior del lateral de la red.
El Andorra quería hacerse con la pelota y no renunciar a su estilo, y eso también pudo aprovecharlo el conjunto local. Julien Ponceau dio un gran pase largo a la espalda de la defensa, Chuki recogió el balón y cuando se iba a quedar mano a mano con Aron se le fue largo el último toque. En una falta en el centro del campo Alejo también quiso sorprender a la zaga rival con un saque rápido hacia Stipe Biuk, que intentó picarla ante el guardameta del Andorra, pero éste repelió la definición.
Pasado el cuarto de hora el volumen ofensivo del Real Valladolid bajó, y eso dio pie a que los de Manso tuvieran también oportunidades de adelantarse. A punto estuvo de hacerlo Nieto tras un pase atrás, pero finalmente la defensa blanquivioleta consiguió alejar el peligro de la portería custodiada por Guilherme Fernandes. Respondió rápido el Pucela con una recuperación de Ponceau en la que jugó rápido con Biuk. El extremo recortó hacia dentro y trató de sorprender a Aron con un disparo al palo corto, pero el portero metió una gran mano para evitar el primer tanto del partido.
Volvió a ser importante el cancerbero visitante en una jugada en la que Chuki realizó una buena conducción, el balón le cayó dentro del área a Latasa y el ariete lo dejó para la llegada de Juric, que remató de primeras, pero se encontró con otra muy buena intervención de Aron. Al descanso se llegó con 0-0 en el marcador y con la sensación de que, sin encontrar del todo claridad en el juego, la falta de efectividad volvía a condenar al equipo.
Un Real Valladolid mucho peor en la segunda parte
El Real Valladolid no comenzó bien la segunda parte y, como de costumbre, Guilherme Fernandes tuvo que dar un paso al frente para evitar que se adelantase el Andorra. De nuevo Nieto fue protagonista con un buen disparo, pero el luso se mantuvo firme para desviar la pelota. Tuvo Stipe Biuk en sus botas otra ocasión muy clara. Alejo sacó un gran centro al segundo palo con la zurda, Biuk tuvo el tiempo de controlar, pero no la paciencia para definir, así que con las prisas por sacar un remate sacó un tiro muy mordido que se fue desviado.
Julien Ponceau fue sustituido en el minuto 52 y a partir de ese cambio el juego, como diría Robe, en paz descanse, “se perdió la cadena que ataba el reloj a las joras”. En otras palabras, el equipo perdió el sentido que darle al balón. Y esa sensación se acentuó tras el cambio de Chuki, que abandonó el terreno de juego con Latasa para dar paso a Arnu y Lachuer. En el segundo acto no hubo peligro, e incluso se dio vida a un Andorra que, con poco, pudo marcar.
En el minuto 80, en una transición, Villahermosa culminó la acción con un cabezazo que se fue por encima del travesaño. En el tramo final del partido Lachuer gozó de dos ocasiones en las que disparó desde media distancia, y en ambas se fue la pelota ligeramente desviada. Con todo, el Real Valladolid no daba argumentos para creer en la victoria, e incluso el empate podía llegar a darse por positivo. Lástima que tampoco fuera así. Minsu anotó en el descuento con una gran definición sin apenas ángulo. El Pucela se despide de Zorrilla este 2025 desesperando a una afición que este año apenas ha podido celebrar en su casa.
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— Real Valladolid C.F. (@realvalladolid) December 13, 2025