Sí, es legal guardar dinero en casa. Así lo confirma Hacienda, que no pone ningún impedimento a que los ciudadanos reserven parte de sus ahorros en metálico, ya sea en un cajón, una caja fuerte o, como se decía antes, bajo el colchón. Ahora bien, que sea legal no significa que todo valga, ya que si ese dinero no está debidamente justificado, Hacienda podría intervenir y sancionarte.
El problema no está en el gesto de guardar efectivo, sino en lo que puede suponer si, por ejemplo, decides ingresarlo de nuevo en el banco sin poder acreditar su origen. En esos casos, Hacienda puede considerar que se trata de una ganancia no declarada y, por tanto, pedir explicaciones, iniciar una inspección o incluso imponer una sanción económica que puede superar el 50 % del valor total.
Cuánto dinero puedes tener en casa sin problemas con Hacienda
Es necesario señalar que, si bien no hay un límite legal para Hacienda en cuanto al dinero en efectivo que puedes o no puedes guardar en casa, debes tener en cuenta que este organismo presta especial atención a los movimientos en efectivo que superen los 3.000 euros, ya sea al retirarlos, ingresarlos o utilizarlos para hacer compras.
De hecho, los bancos están obligados a notificar a Hacienda cualquier movimiento en efectivo igual o superior a esa cantidad, según el artículo 93 de la Ley General Tributaria. Así que si tienes más de 3.000 euros guardados y decides ingresarlos de golpe, no sería extraño que Hacienda te pidiera que justifiques de dónde salió ese dinero y, si no puedes hacerlo, las multas que te puede llegar a imponer son bastante considerables.
Lo más importante es que el origen del dinero esté acreditado. Por ejemplo, si has retirado efectivo de tu cuenta corriente, Hacienda ya tiene constancia de ello, pero si recibes un pago en metálico, como puede ocurrir en ventas entre particulares o cobros no declarados, la cosa cambia al no haber documentación que justifique esa operación.
Casos en los que Hacienda puede sancionarte
Hay dos escenarios especialmente delicados para Hacienda. El primero es cuando una persona guarda dinero en efectivo durante mucho tiempo y después lo ingresa en el banco sin justificarlo. El segundo, cuando se utiliza ese efectivo para realizar una compra importante, como un coche o una vivienda, y no se puede demostrar su procedencia legal. En ambos casos, Hacienda puede interpretar que se trata de una renta no declarada y aplicar el régimen sancionador correspondiente.
En este tipo de casos, las multas pueden llegar al 50% o más del valor del dinero que no se ha justificado, aparte del pago del IRPF correspondiente si se trata de una ganancia patrimonial.
Consejos que debes seguir si quieres guardar dinero en efectivo en casa
Como ya hemos repetido a lo largo del artículo, no hay un límite legal para guardar dinero “debajo del colchón”, aunque sí que es cierto que el Banco de España ha hecho una serie de recomendaciones para quienes quieren tener efectivo para esos “por si acaso” que pueden surgir (no hace falta señalar lo bien que vino este durante el apagón). La entidad financiera aconseja no guardar más de lo equivalente a seis o doce meses de gastos básicos para solucionar cualquier imprevisto, pero sin poner en riesgo todo nuestro dinero, ya que pueden ocurrir muchas circunstancias tales como robos o incluso que este pierda valor.
También debemos tener en cuenta que, si bien para guardar dinero no hay límites, estos sí que existen en cuanto a lo relacionado con su transporte. Dentro de España, si quieres mover más de 100.000 euros, debes haberlo declarado con antelación. Otro de los umbrales que tiene el efectivo es a la hora de pagar en una operación comercial mediante este método, ya que este no debe superar los 1.000 euros.
