El canterano recibió un fuerte golpe de Juankar que provocó que fuera evacuado al hospital y que el Real Valladolid terminara jugando en inferioridad en el empate a cero que cerró la concentración frente al Málaga

Quizá fuera la acumulación de carga de trabajo la que hizo que las piernas pesaran, pero lo cierto es que al Real Valladolid se le vio poco suelto ante un Málaga que debió imponerse a los de Sergio González en el tercer amistoso de pretemporada. El encuentro que cerraba la concentración en Marbella se saldó con un insulso empate a cero que si terminó así fue gracias a la inspiración de Samu Pérez, el guardameta recién llegado para el Promesas, y por alguna buena actuación de Isaac Becerra al final, con la que evitó el tanto de los malagueños.
En la medida que le fue posible, porque contaba con varios jugadores aquejados de molestias, el entrenador catalán repartió minutos de manera equitativa entre sus efectivos, y ninguno de ellos descolló. Así, si bien arrancó la primera mitad generando dos situaciones de peligro de relativa claridad, nacidas de las botas de Pedrosa y de Chris Ramos –especialmente de este–, a la postre terminarían siendo las únicas.
Pronto el Málaga empezó a hacerse con el dominio principalmente del cuero, lo que le permitió poco a poco tener también el territorial. Renato Santos y Ontiveros fueron los efectivos más peligrosos de cuantos pisaron el tapiz, el exblanquivioleta gracias a su velocidad, superior a la del resto, y el luso al pisar área con decisión en varias ocasiones. Después del tiempo muerto para refrescarse, sobre el ecuador del primer tiempo, el portugués y Samu Pérez se las tuvieron tiesas: un despeje a córner del portero a remate del malacitano fue la acción más clara del primer periodo.
Los cambios introducidos al descanso trajeron por un instante nuevos aires, aunque no en ataque, donde el Pucela estuvo atascado. Los primeros compases de la segunda parte fueron más bien igualados, aunque poco a poco otra vez el Málaga se terminó adueñando de la contienda. En parte, porque bien pronto el Real Valladolid se quedó con diez por la lesión de Mayoral, que pilló al resto del equipo en la ducha y sin margen de maniobra para que otro entrara en su lugar. Fue algo así como un simulacro de competición en inferioridad, aunque al trantrán.
Una falta botada por Antonio Domínguez fue lo único que se llevaron a la boca los blanquivioletas en la mitad de juego del rival. Tampoco es que la productividad del rival fuera muy alta, pero Samu Pérez tuvo que tirar de reflejos para evitar por dos veces en sendas acciones a pelota parada el gol del Málaga. En el tramo final sería Becerra quien frenaría los remates de En-Nesyri y de Hicham para mantener el cero a cero hasta el final, como así lo hizo. Para entonces ya todo daba igual: la lesión de Mayoral hace que la concentración termine con la evidente preocupación por su salud, pues podría tratarse de algún problema serio que provoque que esté algún tiempo de baja.
Málaga CF: Munir, Ignasi Miquel, Luis Hernández, Juankar, Adrián González, Renato Santos, Recio, Ontiveros, Rosales, Harper y Lacen. También jugaron Bouhlrude, Mula, Juanpi, Miguel, Andrés, Ricca, Iturra, Miguel Torres, Iván Rodríguez, Juan Cruz, Kellyan, Abqar e Hicham.
Real Valladolid: Masip (m. 32), Moyano, Kiko Olivas, Salisu, Moi, Mayoral, Borja, Carrascal, Pedrosa, Toni y Chris Ramos. Iniciaron la segunda parte Samu Pérez (Becerra, m. 62), Antoñito, Mario, Calero, Nacho, Mayoral Javi Pérez, Carrascal, Moi, Antonio Domínguez y Miguel.
Árbitro: Melero López. Amonestó al local Juankar y a los visitantes Nacho y Moi.
Incidencias: Encuentro amistoso disputado en Coín con la presencia de unas 500 personas en la grada. Tercera prueba de pretemporada para el Real Valladolid.
