El Real Valladolid Promesas no fue capaz de puntuar en casa contra el Marino de Luanco. Los de Javi Baraja cayeron por 0-2 en un partido con dos partes muy diferenciadas. Los visitantes llevaron la dirección del partido en la primera y se adelantaron pronto por un error del filial. Al descanso se llegó con el 0-1 y en la segunda el equipo, con un par de cambios, mejoró considerablemente. A pesar del empuje y de disponer de ocasiones para empatar, el Marino de Luanco sentenció en el descuento.
Javi Baraja, a pesar de la mejoría que evidenciaron sus pupilos, se mostró muy crítico tras el partido. “Lo que no podemos hacer es empezar a jugar en el minuto 46. El equipo no ha sido el que venimos viendo. Es verdad que hemos generado ocasiones después, pero no podemos regalar una parte como la hemos hecho hoy“, dijo el técnico, que afirmó que en la primera mitad “la diferencia ha sido el ritmo y la intención”. “Nosotros si no controlamos el partido somos un equipo vulnerable”, añadió.
Además, el míster lamentó que este tropiezo ha llegado después de que en casa el equipo sí encontró buenas sensaciones, incluso ante buenos equipos como la Gimnástica Segoviana o el Salamanca CF. “Veníamos en una buena dinámica en casa y los dos empates que hemos tenido han sido contra grandes equipos. No me preocupa dónde estemoslos en la clasificación, me preocupan las sensaciones y veníamos de buenas, incluso perdiendo fuera de casa. No veía esta versión del equipo desde hace mucho. Ya se lo he dicho a los chicos, si quieren llegar al primer equipo necesitan dar un paso adelante”, explicó Javi Baraja.
El análisis de Javi Baraja
El equipo mostró una mejor cara cuando fue capaz de poblar más el área, en la primera parte no encontró la claridad que buscaba por dentro con Riki de Moraes como enganche y jugó más por fuera, pero no había los efectivos suficientes en zona de remate. Con la entrada de Tomy y Mario Domínguez eso cambió, pero ¿a qué se debió la falta de continuidad en el medio?
“Yo creo que por disposición del rival lo primero. Te obligan a jugar mucho por fuera, pero no cargamos el área, luego sí lo hicimos. Cuando eso pasa el partido se vuelve más loco, nos precipitamos. Cuando no hay una disposición adecuada intentamos buscar el pase antes de tiempo y perdemos el poso cuando tenemos la bola“, analizó el entrenador.
El Real Valladolid Promesas pidió un penalti por una mano dentro del área que pareció clara. “Me gustaría decirte que es penalti y cuándo es penalti, pero es que no lo sabemos. No obstante, culpar al árbitro de que ha condicionado el resultado sería engañarnos a nosotros mismos. Queremos que los chicos sean conscientes de que esto es lo que ocurre cuando no juegas al nivel que te exige la categoría”, expresó Javi Baraja.
Mario Domínguez, debutante el viernes e importante el domingo
El jugador de 16 años, debutante con el primer equipo el pasado viernes ante la Unión Deportiva Las Palmas, disputó toda la segunda parte del choque ante el Marino de Luanco y fue importante para ganar presencia arriba. En su cabeza estuvo el tanto del empate, con un remate muy forzado en boca de gol que no logró dirigir hacia la portería. “Nos está dando un registro diferente, dentro del área es una amenaza continua. Estamos intentando adecuar su trabajo al nuestro, porque está entrenando con el primer equipo y jugando con el Juvenil estamos encantados y queremos prepararlo para cuando el primer equipo lo necesite, como el pasado viernes”, declaró el míster.
Asimismo, hizo un perfil con las características que el jugador puede aportar en el filial. “Te da mucho de espaldas independientemente de la altura en la que esté el equipo y es un jugador que en área define muy bien, espero que en eso vaya mejorando. Es verdad que no puede trabajar con nosotros la forma que tenemos de jugar con dos puntas, pero tiene cogidos los movimientos que pueden darse en el último tercio”, sentenció.