El goleador en el Tartiere atendió a los medios locales después de una suave sesión de entrenamiento sobre el césped de Los Anexos

Domingo de resaca goleadora en la Avenida Mundial 82. Si el sábado por la noche el Real Valladolid vencía y convencía en el Tartiere, en la jornada festiva los blanquivioletas se entrenaban sobre el césped de Los Anexos.
Como suele ser habitual en estos casos, los titulares ante el Oviedo completaron una sesión de recuperación, mientras que los futbolistas que no pudieron tener minutos trabajaron con un punto más de intensidad.
Y si el protagonista sobre el verde ovetense fue Juan Villar, repitió en la sala de prensa del José Zorrilla, como no podía ser de otra forma, para hablar de su primer hat-trick en Seguda División. “Me quedo con los tres, porque meter esos goles en Segunda es muy difícil y voy a tener un bonito recuerdo del Tartiere. Espero que sea el primero de muchos”, dijo emocionado el extremo.
La celebración de los goles y la finalización del choque fue intensa, aunque sin rabia, tal y como asegura Villar. “Sabíamos que ante el Huesca fue un partido que no se nos dio bien y no estuvimos a la altura. Tenía que cambiar y fuimos a un campo muy difícil, contra un equipo que tenía una buena dinámica en casa y que va a estar peleando con nosotros. Teníamos que salir intensos, agresivos y sabiendo lo que teníamos que hacer“, comentó.
Aunque él marcó un hat-trick, no quiso olvidarse de sus compañeros, porque ante todo son un bloque. “Los tres goles son de todo el equipo, si no estamos bien yo no puedo finalizar las jugadas. Tenemos que trabajar juntos y ser un bloque, porque si no hacemos las cosas bien no vamos a ningún lado. Estamos en una dinámica positiva”, argumentó el ‘Duende de Aroche’.
Aparte del resultado, Juan Villar no quiso olvidarse de la marea blanquivioleta que tomó Ovieod y el Carlos Tartiere, añadiendo emoción a la tarde del sábado. “Fue especial también por toda la gente desplazada. Da alegría por nosotros, pero sobre todo por ver a la gente cómo disfrutaba”, comentó a este respecto.
Pero la pregunta se vuelve a repetir: ¿Y ahora qué? Pues el extremo lo tiene muy claro. Él cree en que es posible y que este Pucela tiene mucha guerra que dar todavía. “Creo que vamos a cumplir los objetivos, aunque es cierto que nos está costando. El equipo se va a meter arriba y vamos a luchar“, explicó. El partido ante el Córdoba pudo crear unas sensaciones similares, pero Villar piensa que ahora sí se pueden redimir y engancharse definitivamente. “Hemos tenido partidos clave y no hemos dado la talla. Espero que ahora sí estemos a la altura“, contestó rotundo.
Es en Zorrilla donde a Portugal le está costando más dar con la tecla. “Contra los equipos de arriba hemos hecho grandes partidos y este sábado demostramos que estamos haciendo bien las cosas fuera de casa. El hándicap está siendo aquí, que nos cuesta más“, reconoció. Y es en su feudo donde hay que ponerse las pilas porque los rivales que vienen no pondrán las cosas nada fáciles. “En teoría, en casa tenemos a los de mitad de tabla para abajo y los equipos que tenemos que dar más de nosotros. Nos está faltando llevar el peso del partido, ser más continuos”, explicó Villar.
Rivales como el Huesca, que luchan jornada tras jornada para conseguir la permanencia, son huesos duros que el Real Valladolid no sabe roer. “Saben las circunstancias que tienen y juegan con sus armas. Aquí en casa nos vamos a encontrar más de lo mismo y tenemos que aprender a jugar esos partidos. Tenemos que dar mucho más”, confirmó el andaluz.
Por último, espera seguir aliado con los goles para ayudar a un equipo que le necesita, aunque como él mismo dice no estuvo preocupado cuando no marcó. “Tengo mucha confianza en mí mismo y sé que son rachas. Tuve una racha positiva y ahora que no marcaba, trabajaba para el equipo. Me quedo con eso. Los goles vinieron este sábado y estoy muy contento. Cuando vienes a un equipo como el Valladolid no te esperas marcar tantos goles. Esto me sirve para seguir trabajando y creciendo”, apuntó el pichichi blanquivioleta.
