Análisis del próximo rival del Real Valladolid.
El Real Valladolid piensa en rojo esta jornada de Liga. Y es que no le queda otra opción que volver a ganar fuera de casa si quiere soñar con los puestos de ascenso directo. Esta vez toca desplazarse para visitar al vecino Numancia en Los Pajaritos, y cualquier resultado que no sea una victoria podría ser el tropiezo definitivo para buscar una de las dos primeras plazas.
Pero no será fácil. La falta de puntería de los de Djukic está pasando factura al equipo en las últimas jornadas y el próximo rival no ayuda. El Numancia, tras el Córdoba, se podría considerar como segundo equipo revelación de la Liga Adelante a estas alturas de temporada.
Noveno en la clasificación con 43 puntos, a dieciséis del descenso y siete del play-off. Sólo Las Palmas podría hacer sombra a los de Pablo Machín como revelación de plata en segunda.
Entrenador y plantilla son conscientes de que la empresa de los puestos que dan derecho a la liguilla de ascenso es difícil, pero también saben que soñar es gratis y que quedan muchos partidos. La jornada pasada ya hicieron hincar la rodilla a todo un candidato como el Elche por un contundente 3-0, lo que además hace que los numantinos se encuentren en un momento óptimo de moral para el domingo.
Doctor Jekyll y Míster Hyde
Solo hay algo que echa para atrás las aspiraciones de play-off de los rojillos: son tan cumplidores en el estadio de Los Pajaritos como débiles lejos de él. El Numancia cumple con solvencia en su feudo para asegurar la permanencia, pero sus flojos números cuando cogen el autobús le echan para atrás a la hora de buscar metas más altas.
Una muestra. De los 43 puntos de los sorianos en Liga, 33 de ellos han sido en casa, traducidos en 10 victorias, 3 empates y tan solo una derrota. Se trata del segundo equipo con más puntos como local, solo por detrás del Deportivo, lo cual hace lógica su racha de seis partidos seguidos con victoria en Los Pajaritos, donde llevan sin perder desde el dos de octubre.
Conjuntos de la parte alta de la tabla como Elche, Almería y Hércules ya han probado el sabor de la derrota en tierras numantinas. Solo el Celta puede presumir de haber escapado con el botín de los tres puntos. El problema del equipo rojo llega como visitante, donde apenas cuenta con una victoria acompañada de siete empates y el mismo número de derrotas.
Por supuesto, los goles refrendan ambas rachas. Los aficionados rojillos solo han tenido que lamentar en siete ocasiones que el balón acabara en las redes numantinas –que con los catorce partidos jugados en Soria hacen una media de un gol encajado cada dos partidos-, mientras que en el otro lado de la balanza han sido veinticinco los goles del Numancia en casa. ¿Y qué ocurre fuera? Veinticinco dianas en contra hacen un terrible contraste con las siete anteriormente nombradas, mientras que los goles a favor solo han sido trece. Ni el Doctor Jekyll y su antítesis Míster Hyde demuestran una transformación como la de este Numancia.
Pasa que esta vez, al menos mirando las estadísticas, a los de Machín les toca dar la cara buena en Los Pajaritos. Aunque no parezca tan patente, al Pucela le espera este domingo uno de los desplazamientos más peligrosos que le quedan hasta final de temporada.
Partidos locos
Por otra parte, no es este el único motivo por el que debería preocuparse el Valladolid. Los partidos ante el Numancia han cogido últimamente la costumbre de ser moviditos, con ritmo trepidante, y eso normalmente suele verse traducido en una lluvia de goles. Esto es algo que suele gustar al espectador, pero a excepción del partido de ida donde el Valladolid remontó el gol de Felipe en propia puerta con dos tantos de Jofre y Manucho en los diez últimos minutos, los resultados no han sido favorables para el Pucela en los últimos tiempos.
Como saben seguidores de Numancia y Valladolid, los enfrentamientos entre sus equipos no son aptos para cardíacos. Los anteriores precedentes además del ya nombrado se remontan a la temporada pasada, con 4-5 en Zorrilla y 3-3 en Los Pajaritos. Auténticos partidos de manicomio.
Si echamos la vista un poco más atrás en busca del anterior choque, hasta la temporada 2008/09 con ambos equipos en primera división, nos encontramos con los dos extremos en cuanto a goles se refiere, con un 4-3 a favor de los rojillos en la ida y un 0-0 en la vuelta. La evidente conclusión es que lo extraño sería ver un partido con pocos goles entre Numancia y Valladolid.
Con ventaja desde el inicio
Al contrario que Djukic, que tendrá que hacer malabarismos en la defensa gracias a las sanciones de Jesús Rueda y Mongil, Machín no contará con ninguna baja por sanción. Lago Junior, Nieto y Malón no se entrenaron el jueves, pero tampoco se espera que ninguno de ellos salga en el once titular de Machín. Por otra parte, y aunque haya un pequeño resquicio a la duda por pequeños problemas físicos, se espera que finalmente esté disponible Sunny y sea de la partida.
Sí estarán seguro sobre el terreno de juego varios jugadores a vigilar como Julio Álvarez, manija esencial del juego numantino y que llega tras hacerle un hat-trick al Elche el pasado sábado, y Juanjo, máximo artillero rojillo con siete goles en la presente campaña. Una pareja a temer de mediocampo para adelante en el once del Numancia.
Curiosidad del rival de esta jornada: En los veintinueve partidos que ha jugado el Numancia esta temporada, ha marcado como promedio el 31’7% de sus 43 goles en la primera mitad, mientras que el porcentaje restante, el 68’3%, lo ha hecho en los segundos 45 minutos.
