Análisis del próximo rival del Real Valladolid.
Son muchas las cábalas que pueden hacerse a estas alturas de temporada respecto a las posibilidades de ascenso en Segunda división. Muchas más de las que parecen si se tienen en cuenta los dos primeros puestos, los dos privilegiados, y los otros cuatro que dan derecho a disputar el play off. Depor, Celta, Valladolid, Hércules, Almería, Córdoba, Alcorcón, Elche…
Por si fuera poco, el Valladolid debe estar pendiente con la incógnita en la cabeza sobre cuál será el resultado en el aplazado partido entre Cartagena-Celta, y para rizar el rizo este fin de semana los dos colosos gallegos medirán sus fuerzas en Riazor.
Pero eso al Pucela no debe importarle. Ya lo ha dicho Djukic esta semana en rueda de prensa: El objetivo es ganar al próximo rival que visitará Zorrilla, el Huesca, que llegará con ganas de escapar de manera definitiva de las llamas de Segunda B.
Con piel de cordero
Al contrario de lo que muchos aficionados blanquivioletas puedan pensar, el partido del sábado no será tan fácil como parece. Con la clasificación en la mano, el Huesca de Quique Hernández se encuentra con 36 puntos, a solo seis de los puestos rojos que marca el primer equipo en descenso, el Alcoyano. Sumado al hecho de que el encuentro se disputará con el Real Valladolid como local, parece pan comido. Nada más lejos de la realidad.
El club oscense llega a Zorrilla en su mejor momento de la temporada, con una racha de cuatro partidos sin conocer la derrota y que le han permitido alejarse de los cuatro últimos puestos en los que ha estado sumido hasta hace bien poco. En estos cuatro últimos encuentros han quedado por el camino contendientes como Elche o Almería, incapaces de rascar un solo punto ante los blaugranas. Apenas el mismísimo Celta, hace tres semanas, fue capaz de escapar de El Alcoraz con un empate. El anterior equipo que hincó la rodilla y que cierra la buena marcha de resultados del Huesca fue el Girona, que cayó por 2-1 hace cuatro jornadas.
Bien es cierto que los de Quique Hernández tienen un colchón considerable de seis puntos respecto al descenso, pero los aragoneses llegan a Zorrilla con la moral alta, dispuestos a prolongar su dinámica positiva y a sacar algo aprovechable.
Ni los jugadores ni la afición del Valladolid deben confiarse. Djukic no lo hará tras el partido de ida, en el que los dos goles iniciales de Óscar y de Guerra quedaron neutralizados por los de Camacho y Bauzá para establecer el definitivo empate a dos en el marcador.
Sistema clásico
En cuanto a método de juego, el Huesca es un equipo que practica un fútbol sencillo, la mayoría de veces traducido en la búsqueda de ocasiones y goles al contragolpe.
Teniendo en cuenta que en esta ocasión juegan lejos de El Alcoraz y que Quique Hernández ha estado ensayando con una defensa de cinco durante parte de la semana, es muy posible que dicho sistema se potencie.
Con esta táctica el Pucela deberá tener paciencia para desarrollar su juego de toque y encontrar los huecos en la zaga oscense, que lejos de casa ha encajado 29 de los 47 tantos que lleva en la temporada, poco más de 1’80 goles de media por partido lejos de El Alcoraz. Por cierto que los oscenses llevan 15 de sus 36 puntos como visitante, traducidos en cuatro victorias, tres empates y nueve derrotas.
Los jugadores blaugranas a atar en corto serán principalmente tres, los tres más goleadores de la plantilla, precisamente. Por orden de mayor a menor perfora-redes estaría en primer lugar el pichichi del equipo, Camacho, centrocampista organizador que lleva once dianas en la temporada. ¿La trampa? El valenciano ha conseguido ocho de esos once tantos de penalti, lo que le hace un especialista para la acción desde los once metros pero hace que su estadística goleadora sea engañosa.
El siguiente en la lista sería el experimentado delantero Roberto, que con siete goles forma una peligrosa pareja junto a un viejo conocido de la afición vallisoletana, Tariq, tercer goleador con seis tantos. Aún así, Hernández no es muy partícipe de alinear a ambos delanteros en el mismo once, por lo que es difícil que ambos salgan de inicio.
Entre los tres pichichis han marcado 24 de los 36 goles del Huesca, lo que significa que 2 de cada 3 dianas del Huesca llevan la firma de uno de los tres pistoleros oscenses.
Bajas importantes
Si bien es cierto que el Huesca solo tiene un jugador en la enfermería y dos sancionados para esta jornada, sí se tratan de bajas significativas para el encuentro de Zorrilla. El centrocampista Bauzá se lesionó recientemente al romperse el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, mientras que Corona y David Vázquez no estarán por acumulación de amonestaciones.
Casualmente, Carlos Lázaro ha sido cedido por el Real Valladolid al equipo oscense hace apenas una semana, pero los aragoneses deberían pagar 100.000 euros para que el medinense pudiera jugar, algo harto improbable, por lo que es también baja casi segura.
Curiosidad del rival de esta jornada: El partido del sábado será especial para Víctor Pérez. Aunque ya jugó como titular en El Alcoraz hace cinco meses, el manchego sigue guardando grandes recuerdos de su ex equipo.
Aunque queda claro que donde más protagonismo está teniendo es en Valladolid respecto a Huesca. Víctor lleva 2.523 minutos jugados hasta el momento en la presente campaña, en gran contraste con los 690 que jugó en la anterior temporada en el Huesca. Mientras que el año pasado apenas fue titular 8 veces, Djukic le ha dado entrada en el once inicial 27 veces hasta la fecha.
