Los bercianos regresan al descenso por la victoria de un Almería que permite a Numancia y Mirandés seguir con opciones de play-off, pese a no ganar a Osasuna y Llagostera
Alavés 2–0 Ponferradina
El Alavés minó la confianza de la Ponferradina y los bercianos caen al descenso ante el que vuelve a ser el líder de la categoría, con dos goles en la primera media hora: el primero de Laguardia en posible fuera de juego y el segundo tras un riguroso penalti a Toquero.
Frenazo a las posibilidades de la Ponferradina de pegar un brinco por la salvación, tras un fin de semana poco de cara. Los de Rubén Vega no hicieron los deberes ante un Alavés motivado por ser el primero y, además, recibieron la negativa noticia del triunfo del Almería, clave al ser el cuadro andaluz el que devuelve al berciano al descenso. Y es que los de gris y verde iban a tener una jornada poco favorable por varias circunstancias.
El conjunto visitante era el que más cerca se aproximaba a la meta rival en las comparsas iniciales. Así, Berrocal y un Melero que recuperaba la titularidad aparecían en los primeros cinco minutos en la entramada defensa albiazul con sendos disparos sin dificultad.
Los bercianos pretendían perder el respeto al conjunto de Bordalás, pero el equipo vasco se lo volvía a ganar con la contundencia ofensiva como la de un Juli al que solo le faltaría empujar.
El escurridizo atacante tiraba de experiencia para anticiparse y, también por posición adelantada, llegaba el 1-0 en el 13′. La falta sacada por Pacheco la cabecea Laguardia en un posible fuera de juego del central, que no tiene opositor. Polémica que continuaba con el penalti del 2-0, cerca de la media hora, por leve toque de Alan a Toquero que deja al central sancionado la próxima jornada. Tiraba mal Manu García, pero el balón iba a la red.
La rápida superioridad en el marcador rompía todos los esquemas de una Deportiva que cedía en el empeño y apenas chutaba, pese a la determinación de Hume en su primera titularidad con Vega. Además, el equipo templario se encontraba con un ‘Glorioso’ decidido a poner más tierra de por medio en la segunda mitad, y Juli perdonaba la buena dejada de Femenía. Por su lado, Toquero casi sorprendería involuntariamente a Santamaría.
Antes de que Melero diese el testigo a Basha, llegaba el intento de los visitantes en un disparo raso de Jonathan, sin problemas para Pacheco. Pocas veces más se vería al extremeño, mientras que, por otro lado, sí tenía actividad Santamaría con más asiduidad. Tras la entrada de Caiado por Acorán, los albiazules gozarían de otra clara ocasión por medio de Juli, que, tras coger el pase al hueco de Toquero, chuta a los brazos del meta visitante.
El tramo final lo pasaba el Alavés como un partido de trámite, sin arriesgar sabiendo el complicado trabajo que suponía para los de fuera marcar en Mendizorroza. En tres días visita El Toralín un Albacete que si no gana en firmará el descenso a Segunda B, como ya lo hizo el Bilbao Athletic, por lo que quedarían dos plazas restantes a disputarse entre Llagostera, Ponferradina, Almería, Mallorca, Huesca e incluso Valladolid.
Osasuna 3–2 Numancia
El Numancia se va de vacío de Pamplona tras ir ganando por 0-2 en la primera parte, gracias a Nacho y Pablo Valcarce, aunque pudo sumar un tercero invalidado de Callens. Los sorianos sufrieron la remontada local por un doblete de Merino y un penalti transformado por Roberto Torres.
El Sadar sabe provocar tardes gloriosas de tensión y difícilmente tira la toalla de su Osasuna. El conjunto navarro lograba la machada con la garra que le caracteriza para no solo igualar un 0-2, sino incluso ponerse por delante. Una vuelta de tuerca que, además, hace que los de Martín se vayan hasta la cuarta posición y tengan bastantes posibilidades de pelear por un play-off donde un gol puede cambiar el rumbo de toda una eliminatoria.
Eso mismo era lo que hacía el Numancia al comienzo de choque: ser el primero en pegar. Por fortuna, el tanto de Callens era anulado por un milimétrico fuera de juego. O no tanta, pues en segundos los sorianos sí conseguían el gol en un zurdazo de Nacho. No contentos con el 0-1, los de Arrasate firmaban el 0-2 en menos de cinco minutos, con una volea de Pablo Valcarce tras la excepcional arrancada y pase en vaselina de Medina.
Poco duraría la alegría visitante, pues al minuto Mikel Merino recortaba distancias en una falta que patea Olavide y que remata por dos veces el ‘8’ rojillo. Más adversidades a los dos minutos con la lesión de David Concha. Minutos complicados para un Numancia que de ir ganando por dos tantos pasaba a vencer por uno, y con un cambio menos, frente a un conjunto de Enrique Martín que se animaba después de disminuir la ventaja.
Tras un tramo final de mitad donde los locales sí eran el Osasuna reconocible, en la segunda más aún, aunque Nacho retaba a Nauzet después de hacer la galopada de su vida. Sin embargo, el cuero y las internadas las protagonizaban los de casa, que con Miguel De las Cuevas multiplicaban su dimensión en los remates. El alicantino, tras salir de revulsivo, provocaba el penalti del empate al tocar su centro en la mano de Callens.
Roberto Torres no titubearía para engañar totalmente a Munir en el 76′ y firmar su décima diana este campeonato, si bien el goleador del partido sería Mikel Merino con su doblete en el 89′. De nuevo a balón parado, pero esta vez desde el punto de esquina sacaba Olavide al primer palo y el próximo borusser remataba de cabeza a las mallas darle la vuelta al marcador y cosechar una trabajada victoria.
Por su parte, el Numancia todavía no tiene la salvación asegurada y pone cuesta arriba el play-off, pues tiene que ganar en las tres jornadas restantes y necesita un punto para asegurar la promoción. Una permanencia que podría conseguir este miércoles recibiendo a un Lugo que será equipo de Segunda un año más, después de vencer en casa y mandar al Bilbao Athletic a la tercera categoría del fútbol español.
Mirandés 0–0 Llagostera
El Mirandés también habría consolidado la permanencia de haber vencido al Llagostera, aún en puestos de descenso, y está obligado a ganar todo para la meta del play-off. El conjunto catalán se encomendó a un espectacular René bajo palos, que impidió el triunfo de los burgaleses.
Mucho se va a lamentar el Mirandés de dejarse dos puntos en casa frente a un Llagostera al que no marcaba ni en la ida ni en la vuelta. Con este 0-0 los burgaleses se suman al del Elche contra Leganés y Numancia, pero el de Anduva tiene más trascendencia al hacer que, como los sorianos, los de Terrazas prácticamente se olviden del objetivo de la promoción en un encuentro completamente desnivelado para los jabatos.
Un desequilibrio que ya ocurría en los primeros cinco minutos, con un Álex Ortiz que campaba a sus anchas lejos de su posición de central para rematar en los constantes centros de Alain desde la izquierda. El donostiarra surtía una rosca que el andaluz no empujaba con René ya batido. El cancerbero azulgrana se encontraba un minuto después con una picada de Sangalli en dirección a la escuadra.
Tras un principio intenso por parte del conjunto rojillo, la tregua terminaba a los veinte minutos con otro centro de Alain al que Corral cabecea y otra vez Ortiz no logra el gol. La jugada la termina Ion Vélez con un remate con el exterior a saque de esquina. Más asedio local con un disparo de Néstor que, como un imán, vuelve a tocar en Ortiz y este toca en el travesaño.
Al Mirandés le faltaba la culminación final. Mientras, el conjunto de Alsina en las escasas veces que llegaba a las inmediaciones de Raúl acertaba en disparar a puerta, como el chut de Imaz que obligaba a la palomita del portero jabato superada la media hora. La segunda mitad comenzaba con el cambio de Fofo por Benja y los visitantes saltaban con más brío para intentar inaugurar el marcador en los disparos de Imaz y el exrojillo Emilio Sánchez.
Sin embargo, el cuadro de Terrazas tenía en mente evitar el empate. Alain probaba a René en dos acciones del ecuador de mitad, antes de que Sangalli pusiera un centro sin rematador como tantos anteriormente. En el compás final los de casa dejarían vivos al conjunto catalán. O, mejor dicho, René hacía una memorable actuación para dejar con la miel en los labios a los de Miranda.
Provencio obligaba a una mano salvadora de un René que antes había despejado la falta de Alain que iba al palo, ese mismo en el que Ortiz no tendría premio cerca del tiempo cumplido antes del remate de Kijera. Como dice el propio club: el balón no iba a entrar en Anduva. El estadio jabato volverá a ver a los suyos el miércoles frente a un Córdoba con el cuchillo entre los dientes por recuperar un puesto en la promoción tras ganar al Elche.