Paulatinamente, conforme se acerca la pretemporada y desde que Carlos Suárez anunció la compra del club, se va acelerando la toma de decisiones en el capítulo de altas y bajas, pero no sólo en lo que concierne a la primera plantilla.
Y es que, después de la decepción que supuso la no clasificación del filial para el pasado play-off, y que desencadenó la salida del club de Pedro Coria y Manuel Retamero, éste debe reforzarse en busca de dar un nuevo salto de calidad, como de hecho viene haciendo.
Así, después de asegurarse los servicios del central Fran No y del meta vasco Jon Villanueva, el Real Valladolid se ha hecho el pase de Miguel Ángel González Larsson, atacante canario de origen sueco que militó la pasada temporada en el Real Ávila durante una temporada, prorrogable en caso de que el club lo estime oportuno.
Rápido y dinámico, destaca por su visión de juego y capacidad de asociación entre líneas. A pesar de no haber destacado especialmente en la faceta goleadora, se suma al Real Valladolid Promesas para sumar en las labores ofensivas del equipo que dirigirá Javier Torres Gómez.
No podrá contar, en su nueva andadura, con el guardamenta Alberto, firmado por el Sevilla; el mediocentro Durán, que acaba de firmar por el Reus de la Segunda División B; ni con Rubén Sánchez, jugador que llegó de la mano de Antonio Gómez, que no terminó de cuajar a pesar de las expectativas creadas y que probará ahora suerte el el filial del Getafe.
De inicio no lo hará, tampoco, con los recién llegados Villanueva y No y con los ya conocidos Felipe y Toni, llamados a filas por Miroslav Djukic para realizar la pretemporada con el primer equipo.