El Parquesol no quiere posponer su ascenso. Será equipo de Primera B si consigue ganar al Dinamo Guadalajara en un José Luis Saso que apunta al lleno

Una vez dijo un sabio, el de Hortaleza concretamente, que el fútbol consistía en ganar, ganar y volver a ganar. Porque, aunque parezca mentira, la victoria también agota, y no todos los equipos son capaces de vivir instalados a ella. Si hay algo que ha demostrado el Parquesol esta temporada, tras dieciséis triunfos, es que de ganar precisamente no se cansa. Y ha llegado el momento de confirmarlo.
Sin medias tintas, este domingo (16:00 horas) el Parquesol Femenino disputará el partido más importante de su historia, que puede terminar con el equipo en la Primera División B. Es, sin duda, una final para las de Rubén Jiménez, que además cuentan con la tranquilidad de que si no es esta semana cuando se logre, todavía quedarán tres oportunidades más.
Las naranjas necesitan tres puntos para ascender y este fin de semana cuentan con la opción de celebrarlo en casa, en un José Luis Saso que podría llenarse, pues el partido lo merece y el tiempo va a acompañar. Aun así, si por un casual el Madrid B cayera contra las colistas unas horas antes, el conjunto vallisoletano ya saldría a jugar su partido en Primera B, sin necesidad de puntuar.
Puede parecer fácil, pero enfrente estará un rival que no viene de comparsa. Ni mucho menos. El Dinamo Guadalajara se juega seguir en la lucha por alcanzar el quinto puesto –o incluso el cuarto – y sabe que las opciones pasan por puntuar en el Saso, algo que solo han conseguido tres equipos esta temporada.
“Ver el objetivo cerca es algo positivo. El equipo en situaciones de presión responde y tenemos ganas de culminar el trabajo que estamos realizando”, apunta el técnico naranja, que espera que sus chicas saquen provecho de que el Dinamo se juega el tipo, y que, por esa razón, “puedan dejar más espacios”. “Ellas vienen a muerte y saben que hasta un empate les puede dejar fuera”, añade.
La mala noticia para las de Rubén es que afrontan la final sin su máxima goleadora, Ali Carranza, que no entra en la convocatoria por precaución, en vista de que quedan tres partidos por delante. En su lugar estará Carolina, que no se cansa de marcar y que, cuanto más difícil es el reto, más motivada entra al terreno de juego.
Y si no se diera el caso, contribuirá un Saso que llevará en volandas a su equipo, tal y como desea el míster. “Sería una bonita experiencia y una recompensa que el campo se llenara. Ojalá sea posible ganar en casa, ante nuestra gente“, afirma un Rubén Jiménez que convoca a diecisiete futbolistas para la causa: Lucía, Martina, Iria, Paulita, Maka, Noe, Judy, Nata, Rivas, Charle, Sandra, Yarima, Alicia Fernández, Alicia Rey, Carla, Carolina y Barbi. Además de Ali, Murita tampoco entra en la lista.
El Parquesol ya ve la orilla a una temporada esplendorosa. Lo será, porque sea esta semana o la siguiente conseguirá el objetivo de ascender, pero es incontestable que la sensación de disfrutarlo en casa no es comparable a hacerlo fuera. El Saso, como tantas y tantas veces, será el oráculo que emita la respuesta quién sabe si definitiva. Ojalá. Como también dijo Luis Aragonés, las finales no se juegan si ganan. Y lo de este domingo es lo más parecido a una final.
