“Para que vean que el lobo no es tan feroz como se dice, os voy a cantar una canción de amor”. A ritmo de Tú Volverás, una canción interpretada por el ‘Lobo’ Diarte en el programa de nochevieja de TVE, España dio la bienvenida al año 1976. El punta paraguayo mentía. O al menos mentía parcialmente. Dentro del campo debía ser temido y así lo demostró desde su llegada a España.
Carlos ‘el Lobo’ Diarte aterrizó en Zaragoza en 1973 procedente del Olimpia, donde empezó su carrera profesional. En La Romareda se juntó con otros futbolistas de Paraguay: Felipe Ocampos, Saturnino Arrúa, ‘Chacho’ Blanco y Adolfo Soto. De esa manera nacieron los famosos ‘Zaraguayos’, que hicieron frente al Santos de Pelé e hicieron soñar a la afición zaragocista hasta el punto de pelear por ganar la Liga. En tierras aragonesas anotó 32 goles en 79 partidos.
En el mercado veraniego de 1976 puso rumbo al Valencia, donde hizo en su primera temporada una muy buena dupla con otro mítico delantero, Mario Alberto Kempes, pero poco a poco se desinfló en Mestalla. Así fue como el ‘Lobo’ Diarte llegó a Salamanca en busca del aullido perdido.
El ‘Lobo’ Diarte en el Helmántico
“He atravesado un bache como jugador del Valencia, pero el Diarte futbolista estará presente entre los goleadores de este año, estoy convencido. Espero no defraudar a la afición salmantina”, dijo Diarte nada más firmar por la Unión Deportiva Salamanca. Mientras que a su vez resaltaba la ironía de este deporte “En Valencia, muchos millones y pocos goles. En el Zaragoza, pocos millones y muchos goles. Fíjense qué difícil el fútbol”, bromeó.
El ariete fue importante para lograr la permanencia en la temporada 1979/80. Disputó 31 partidos en los que anotó siete goles. Sin embargo, aquella campaña se vio empañada por el llamado “escándalo de Málaga”. Al conjunto unionista se le acusó de haber amañado el encuentro contra el Málaga en la jornada 31 que le sirvió para lograr la permanencia de forma matemática tras ganar 0-3.
La relación entre el ‘Lobo’ Diarte y la entidad blanquinegra no se alargó más que ese curso. El paraguayo se marchó al Betis, donde también se convirtió en uno de los grandes delanteros de la historia verdiblanca. En Sevilla jugó 83 partidos en los que vio puerta en 33 ocasiones.
Después pasó por el Saint-Éttiene y se retiró en 1987 en su casa, de nuevo en Olimpia. Su trayectoria futbolística no acabaría aquí. Tan solo un año tardó en comenzar su aventura como entrenador. Comenzó en España, en el Valencia, como ayudante. Tras ello dio el paso a ser primer entrenador, pasó por el Deportivo Alginet y por el Atlético de Madrid B, hasta que recibió otra llamada desde el Estadio Helmántico.
Su breve etapa como entrenador del Salamanca
La campaña 1998/99 fue la última del Salamanca en Primera División. El equipo acabó siendo el último clasificado con 27 puntos. A lo largo de aquella temporada, hubo hasta cuatro entrenadores. Comenzó en el cargo Miguel Ángel Russo, Balta se hizo cargo de forma interina Ortuondo tomó el relevo y el último en llegar, para tratar de solucionar una situación que parecía imposible fue el ‘Lobo’ Diarte. El que fuera jugador de la Unión estuvo al mando durante los últimos nueve partidos. Ganó uno, contra el Alavés, empató dos y perdió el resto.
Tuvo dos experiencias más como técnico. La primera fue en el Gimnàstic de Tarragona, en la temporada 2001/02. Llegó en la jornada 24 con el objetivo de salvar al equipo del descenso a Segunda B y no lo consiguió por tan solo un punto. La segunda y última fue como seleccionador de Guinea Ecuatorial. Duró en el cargo un año, de 2009 a 2010.
El ‘Lobo’ Diarte falleció el 29 de junio de 2011 en Valencia debido a un cáncer que sufría desde hace tiempo. El Valencia homenajeó al que fue su delantero con un gran mural en la fachada de Mestalla.
