La capitana del CD Parquesol afronta “con toda la ilusión” el debut del conjunto naranja en la nueva Segunda División

Foto: Sergio Borja
Sheila Prada afronta su séptima temporada jugando en el CD Parquesol, las mismas que el fútbol femenino lleva vistiéndose de color de naranja. Lo hace con la mochila cargada de vivencias, gracias a toda una vida calzándose las botas, incluso en Primera División en tiempos del Real Valladolid. Era otro ‘futfem’ aquel, aún alejado de la eclosión definitiva que está sucediendo y que, con mucho esfuerzo y con mucho sacrificio, ha llevado a Maka y a sus compañeras a la que se va a llamar Reto Iberdrola, una segunda categoría mucho más reducida y dura que la anterior.
Estos valores, que son desde hace años intrínsecos del vestuario naranja, deben permanecer férreos, igual que su capitana se muestra en defensa. Deben, incluso, reforzarse, con la misma ilusión que muestra ella antes del debut de este fin de semana en Mareo frente al Real Sporting de Gijón.
¿Qué sientes ante el estreno en la nueva categoría?
Siento que por fin empieza lo bueno. Estamos contentas de que empiece ya, con muchas ganas. Como indica el propio nombre de la liga, lo afrontamos como un reto, pero personalmente estoy deseando afrontarlo. Pese a derrotas como la del otro día contra el Logroño las sensaciones que tenemos es de que podemos seguir siendo competitivas. Tenemos mucha ilusión y muchas ganas.
¿Cómo crees que llega el equipo?
Creo que llega bastante bien. En pretemporada nos hemos medido a equipos bastante duros y creo que perder nos ha venido también muy bien; de cada derrota se saca un aprendizaje. Hemos hecho una preparación muy buena.
A nivel personal, ¿qué esperas de esta temporada?
Haber jugado ya en Primera División hace que ya haya jugado en alguno de los campos en los que lo vamos a hacer. Vamos a ver más calidad, vamos a enfrentarnos a equipos con mayores presupuestos, con mejores instalaciones, con más medios que nosotras, que no dejamos de ser un equipo de barrio, pero aun así estoy convencida de que vamos a dar mucha guerra. En la liga de Madrid ya nos hemos enfrentado a filiales y clubes con más medios y aun así hemos conseguido vivir cosas muy bonitas.
El equipo, no obstante, se ha reforzado…
La gente nueva que ha llegado va a aportar muchísimo. En pretemporada lo hemos visto, en cada entrenamiento; tienen mucha calidad y, gracias al esfuerzo que ha hecho el club para poder traerlas, van a dar un puntito más a lo que ya teníamos y a con ellas vamos a dar un salto de calidad.
¿Qué supone que, además, siga la plantilla de la temporada pasada al completo?
Es un premio. Somos las jugadoras que ascendieron el año pasado y que demostraron ser una piña; el reflejo es que nunca dimos un partido por perdido y conseguimos muchos puntos al final. Nuestra fortaleza es nuestra unidad, y este año, desde pretemporada, gracias a las incorporaciones, esa piña se ha hecho más grande y más fuerte.
¿Cómo estás viviendo los cambios que está sufriendo el fútbol femenino?
El avance ha sido lento, pero se está notando. De los recursos que teníamos antes a los que tenemos ahora hay un salto que parece pequeño, pero que cuando has vivido el proceso te parece brutal. Tiene que seguir cambiando, tiene que haber más apoyo y más chicas que quieran jugar y luchen por ello, pero, por ejemplo, yo lo noto en la calidad de los entrenamientos, en el material del que disponemos… Cuando conseguimos el ascenso, pensar en todo eso, y en que iba a vivir todos estos cambios, a disfrutarlo siendo parte de ello, fue una pasada. No cabía en mí de la emoción.
Por tu experiencia, y en una plantilla tan joven, te tocará ejercer más de una vez de consejera, ¿no?
Como capitana es mi deber, intentar inculcar ciertas cosas que quizás las más jóvenes no conozcan. Ser capitana es un estímulo y te hace estar más pendiente del estado de todas, ayudarlas a tirar hacia adelante o a comprender lo que están viviendo, aunque en el vestuario todas valoramos la oportunidad y la posibilidad que tenemos de vivir algo así.
Después de vivir tantas etapas, y teniendo en cuenta el punto en el que se encuentra el fútbol en estos momentos, ¿qué es este deporte para una jugadora?
En mi caso personal, el fútbol es vida. Es mi deporte favorito, mi método de desconexión, son retos, son sueños, alegrías, alguna que otra tristeza… Para mí el fútbol es una parte importantísima de mi vida.
