El Burgos CF ha hecho oficial este miércoles el retorno del hijo pródigo: Mario González. El delantero de la localidad burgalesa de Villarcayo retorna al club en el que empezó a dar sus primeros pasos dentro del mundo del fútbol y lo hace como un hombre hecho y derecho, con 29 años y una dilatada experiencia a sus espaldas, que pondrá al servicio del equipo del que es aficionado y en el que compartirá frente ofensivo con Fer Niño y con Mateo Mejía, en lo que supone, al menos sobre el papel, un claro salto de nivel respecto al pasado año.
No en vano, Mario González es un goleador consumado, que ha sido capaz de demostrar su capacidad para rebasar las porterías contrarias en múltiples destinos, hasta el punto de hacerse acreedor de un apodo que lo dice todo: ‘El Pistolero’. Ciertamente, lleva un par de temporadas sin encontrar un volumen anotador grande y viene de no ser todo lo importante que le gustaría en Los Ángeles FC, club con el que acaba de rescindir el contrato que les unía, si bien confían los ‘Hijos del Frío’ en que en casa vuelva a ser el delantero que era.
Otro reencuentro con Ramis
A imagen y semejanza de lo ocurrido con Sergio González o con Víctor Mollejo, el fichaje de Mario González por el Burgos supondrá su reencuentro con Luis Miguel Ramis, bajo cuyas órdenes jugó en la temporada 2021/22, en la que el futbolista de Las Merindades cosechó sus mejores números en el fútbol profesional español: seis goles de los que el CD Tenerife se valió para disputar el play-off de ascenso a Primera División. En lo personal, supuso aquello un paso adelante, después del tímido paso atrás que había dado previamente en el Sporting de Braga.
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— Burgos Club de Fútbol (@Burgos_CF) August 13, 2025
No en vano, después de salir de La Fábrica del Burgos con dirección al Villarreal, en el conjunto amarillo Mario consiguió debutar y dejar unas buenas sensaciones, refrendadas con los quince goles que hizo en la máxima categoría del fútbol portugués en las filas del Tondela. A orillas del río Miño el burgalés tuvo la tercera de las varias experiencias extranjeras que acumula y, después de estar con Ramis en el ‘Tete’, pasó por el Leuven belga, en el que de nuevo superó la docena de tantos (quince entre todas las competiciones), tras lo que firmó por Los Ángeles FC.
Mario vuelve para buscarse a sí mismo
En Estados Unidos -como había hecho tímidamente en el Villarreal-, Mario González jugó al más alto nivel en lo que a exigencia se refiere, aunque el revólver se le encasquilló y desde entonces no ha vuelto a ser el pistolero que era. Al otro lado del charco no acabó de encontrarse y volvió a Europa; concretamente, a España, puesto que en la temporada 2023/24 recaló en el Real Sporting de Gijón, donde solamente fue capaz de ver portería dos veces. La pasada campaña tampoco dio con la tecla: ni en el Famalicão luso ni en el Lech Poznan polaco.
No obstante, el bagaje de 176 partidos como profesional y los 50 goles marcados, así como el sentimiento burgalesista, son razones suficientes para acometer su fichaje y aguardar que, en casa, vuelva a ser el que era; ese delantero potente en acciones al espacio, autosuficiente a la hora de generarse sus propias ocasiones y letal en el área, unos rasgos que el Burgos ha recordado que tiene en el comunicado que oficializa su fichaje. Este, con todo, se da por una sola temporada, aunque con todo el ánimo de que salga bien y de que ayude a que el proyecto del Burgos crezca en la categoría.
 
			