Nadie en el entorno del Real Valladolid ha querido caracterizar el encuentro de este domingo, ante el Almería, como una final para Mendilibar y sus hombres. Más de uno y de dos, sin embargo, son sabedores de que sobre el tapiz del Nuevo José Zorrilla estarán en juego más que tres puntos.
Nadie a lo largo de la semana ha olvidado que son nada más que tres las victorias que ha logrado el Real Valladolid en los últimos treinta encuentros ligueros, y que sólo el pobre bagaje del resto de equipos parece salvar a los blanquivioletas, hasta el momento, de la quema. No obstante, ésta parece hoy cercana. Tanto, que podría darse el caso de que si no se vence al Almería, un equipo que hace tiempo entró en barrena caiga finalmente por el precipicio si el Tenerife logra arañar algún punto ante otro conjunto en horas bajas, el Real Zaragoza.
Es por ello que quizá tampoco a nadie se le escape que después de muchas tardes de gloria y buen fútbol, y otras cuantas de disgustos propios y del respetable, José Luis Mendilibar se encuentra en la picota, hecho que venía siendo constatado en las múltiples críticas que venía recibiendo y finalmente confirmado con la presunta búsqueda de su posible sustituto.
Son pues más de tres puntos los que están en juego ante el equipo que entrena el siempre mediático Juanma Lillo. Peculiar puede parecer que sea justamente un ex entrenador de Roberto Olabe el que se cargue al actual, si bien el tolosarra llega a Valladolid más bien con la mente puesta en lograr una victoria que deje a los puestos de descenso a cuatro puntos. Éste sería, además, el valor del triunfo logrado ante un equipo con el cual tendrían el golaverage ganado, dado que en la primera jornada de Liga se produjo en el Estadio Mediterráneo un empate a cero entre ambos contendientes.
Para tal fin, recupera a los argentinos Piatti y Solari, que sustituyen en la convocatoria al sancionado Acasiete y a un David Rodríguez que parece cercano a la salida del club almeriense. Además, podrá contar también con nuestro ex, Henok Goitom, quien a lo largo de la semana arrastró unos problemas físicos que hicieron peligrar su vuelta a la capital del Pisuerga.
En los cuatro encuentros que el vasco lleva dirigiendo a su nuevo equipo, los rojiblancos parecen haber cambiado de actitud con respecto a la mostrada anteriormente con Hugo Sánchez en la dirección. Han cambiado también la manera que tienen de desarrollar su fútbol, ya que Lillo parece gustar más de dar un buen trato al balón ya desde la salida, como demuestra el hecho de que el defenestrado Corona haya vuelto a las alineaciones para acompañar en el mando de operaciones a Fernando Soriano.
No renuncian en cualquier caso los andaluces al patadón a seguir, dado que no deja ello de ser una salida válida con dos veloces puñales en los costados, como son los importantísimos Crusat y Piatti. Y es que, junto al brasileño Diego Alves y al ex de Guardiola, Chico, conforman los ‘pequeños matones’ la columna vertebral de un equipo que viene notando más de lo que le gustaría la ausencia de Álvaro Negredo, dado que sin haber variado mucho más sus piezas, siente en sus estadísticas la ausencia de un goleador que marque diferencias como hasta ahora no han podido hacer Uche, Goitom, Solari o David Rodríguez.
Los dos últimos se vienen alternando en la lista desde que Hugo Sánchez dejó de insuflar de garra a un equipo que busca más los espacios en un medio campo donde cabe destacar la labor del camerunés Modeste M’bami, llegado ya cerrado el plazo estival junto a Bernardello, ambos tras obtener de sus anteriores encuentros la carta de una libertad que ahora, partido tras partido, el ex del Olympique Marseille.
El once que cabe esperar en el conjunto almeriense es el formado por Diego Alves; Cisma, Chico, Pellerano, Juanma Ortiz; Fernando Soriano, Modeste M’bami; Crusat, Corona, Piatti y Henok Goitom. Completan la lista Esteban, Michel, Bernardello, Borzoni, José Ortiz, Nieto y Solari.
En el bando local, Mendilibar recupera a Álvaro Rubio y Manucho, después de no contar con ellos en las últimas semanas, cosa que no podrá hacer con Borja, sancionado. Por lesión seguirán fuera Sisi y Jacobo Sanz, ambos recién operados, y por motivos técnicos Barragán, Héctor Font, Jonathan Sesma y el último jugador que ha comenzado a entrenar a las órdenes del de Zaldibar (que no el último en llegar, dado que el club viene de confirmar la también cesión de Asier del Horno), el extremo madrileño Sergio Gontán, ‘Keko’.
Ante esto, el once del cual dependerá que el encuentro sea para el Real Valladolid un punto de inflexión o un punto y aparte, será el formado por Justo Villar; Marcos, Luis Prieto, César Arzo, Pedro López; Canobbio, Álvaro Rubio, Carlos Lázaro, Pelé o Nauzet Alemán; Diego Costa y Manucho ‘El Aviador’.
La lista se completa con Fabricio, Javi Baraja, Nivaldo, Haris Medunjanin, Marquitos y Alberto Bueno.
El encuentro será dirigido por el colegiado asturiano Muñiz Fernández, ante el cual el Almería buscará la segunda victoria a domicilio de la temporada y el Real Valladolid lograr hacer valer aquello de no hay dos sin tres ante un rival que no conoce la victoria en primera división en el Estadio José Zorrilla.