El centrocampista del Real Valladolid critica la segunda parte que hizo su equipo en Anduva y desea que eso no se repita en las tres últimas “finales”
El Real Valladolid atraviesa un ‘déjà vu’. Tras el empate cosechado en Anduva ante el último clasificado, vuelve a vivir el ambiente que se produjo tras la debacle ante el Sevilla Atlético. Míchel, en su comparecencia ante la prensa, lo asume, aunque añade que existe una gran diferencia. Los pucelanos se encuentran por fin en zona de play-off.
“No hay excusas para la segunda parte ante el Mirandés. Tuvimos ocasiones para cerrar el partido, pero es verdad que la actitud no fue la correcta”, criticó. Por ello, Míchel desea que no se vuelva a repetir en los tres partidos que quedan, en los que el Real Valladolid se juega la promoción. “Ojalá sirva para entrar al 100% en el resto de encuentros”, añadió.
La primera final, este sábado ante el Getafe, equipo que el ex azulón tilda de “veterano”. “Es el rival más difícil y el más importante. Está peleando por subir de forma directa. Tiene grandes jugadores y sobre todo mucha experiencia”, señaló. Aun así, está convencido de que el factor campo será importante. “Jugamos en casa y eso se tiene que notar”.
Además, el centrocampista advierte de la dureza que tendrá el partido. Si su conjunto se juega el play off, los madrileños quieren la segunda plaza. “Será un partido muy disputado, con enfrentamientos individuales. No me sorprendería que el partido se decidiera en una jugada individual o a balón parado”, insinuó.
El Real Valladolid jugará dos de los tres partidos ante su afición, a la que Míchel ha tirado un guiño: “La hinchada se ha portado bien en los momentos malos. Tenemos que estarles agradecidos y esperemos que nos ayuden a dar ese último empujón para poder regalarles el play-off”, apuntó.
Pero no es hora de echar cuentas ni de mirar a otros rivales porque, como afirma, dependen de ellos mismos. “Nuestro objetivo era llegar a esta jornada con opciones, y ahora tenemos la sartén por el mango”, comentó un Míchel que se centra únicamente sus resultados, y no del resto de equipos ya que si los blanquivioletas ganan los tres partidos, estará en la promoción.
Por esa razón, da por bueno el punto cosechado ante el Mirandés. “En cada jornada hay sorpresas. Los de abajo quieren salir y los de arriba quieren ascender de forma directa. Y ese punto nos ha metido en play-off, pese a que nos dolió no ganar”, animó.
La rueda de prensa de Míchel se produce cuando aún no se ha cumplido una semana del adiós de Braulio Vázquez, de quien ha hablado maravillas, pese a que su forma de comunicarlo “no ha sido la más correcta”. “Todos estamos dolidos, pero agradecidos a él. Nos ha deseado el ascenso y yo también le deseo lo mejor”, afirmó.
Regresa Lichnovsky, descansa Leão
En los terrenos de juego, la primera plantilla del Real Valladolid se ejercitó en Los Anexos con dos ausencias: la de Mata, por lesión, y la de Leão, por descanso. Un descanso al que Míchel hizo referencia también, ya que a él le tocó ausentarse del entrenamiento la semana pasada. “A estas alturas de temporada es importante el descanso”, señaló.
Quien regresó a los entrenamientos fue Lichnovsky, ya recuperado de la torcedura que sufrió este martes. El próximo entrenamiento se celebrará este jueves a puerta cerrada en el Estadio José Zorrilla a partir de las 10.30 horas.