El delantero tudelano es el máximo anotador de Segunda División B con catorce tantos y está a solo uno de convertirse en el mejor atacante del filial en este siglo
Hay temporadas que quedan para el recuerdo y la que está viviendo este curso el Real Valladolid Promesas es una de ellas. Tras firmar el empate con el Leioa, los de Javier Baraja se aúpan a los puestos de play-off de ascenso. Ocupan la cuarta posición y no conocen la derrota desde el 26 de octubre, cuando el Bilbao Athletic superó al filial blanquivioleta por 4-1.
Lo cierto es que Miguel de la Fuente es uno de los responsables de esta buena dinámica que esta atravesando el filial. Sus catorce goles en 21 jornadas le convierten en el máximo anotador de Segunda División B, por delante de Rufo (Pontevedra CF), que tiene trece tantos, y de Rodado (UD Ibiza), con doce –ambos, del Grupo I–.
El tudelano ha marcado siete de ellos de penalti y otros tantos de jugada dinámica. Ha disputado 1.756 minutos, por lo que ve puerta una vez cada 125,4′. Asimismo, uno de los aspectos que más llama la atención es que, cuando el ariete marca, el Promesas no pierde: lleva seis victorias y cuatro empates. Además, en siete ocasiones ha anotado el primer gol y en las restantes, el último.
Con todo ello, Miguel de la Fuente supera los registros de Higinio y ya es el máximo goleador del filial desde el ascenso a Segunda B. En la 2016/17, el murciano fue el artífice de trece dianas en 31 encuentros. Otros jugadores que han dejado su huella en la historia goleadora del cuadro blanquivioleta fueron Jose Arnáiz y Luis Suárez. El extremo izquierdo, que actualmente milita en las filas del CD Leganés, y el delantero del Real Zaragoza anotaron once tantos en las campañas 2015/16 y 2017/18, respectivamente.
Un escalón más abajo está Jorge Hernández, que en la 2014/15 anotó diez goles. Asimismo, el ariete tudelano está a una diana de ser el mejor atacante del filial de este siglo, ya que sus registros coinciden con Carreño, que también hizo catorce en la 2005/06.