El lateral madrileño, ex de Rayo Vallecano, descarta hacer cábalas y fija el objetivo ineludible del Real Valladolid en sumar los tres puntos en la que fue su casa durante cinco años
El Real Valladolid se ejercitó este miércoles en Los Anexos en una sesión con las ausencias ya habituales de los lesionados Luismi, Anuar, Pablo Hervías y Stiven Plaza, a los que se sumó el trabajo al margen de Kiko Olivas, que arrastra unas molestias musculares que en principio no le harán perderse el choque del domingo ante el Rayo Vallecano.
Una vez concluyó la sesión, atendió a los medios un jugador que vistió la zamarra de la franja, un Nacho Martínez para quien el partido será especial por su pasado vallecano y “raro, porque ya están descendidos”. No obstante, durante toda su intervención incidió en que los blanquivioletas han de estar centrados en sí mismos porque se están “jugando la vida”. El horario unificado ayudará, a priori, a esa concentración, ya que no cree el carrilero que puedan estar “a expensas de nadie”.
“Tenemos que jugar nuestro partido, lo que pase en otros campos no depende de nosotros”, arguyó, y repitió: “Tenemos que centrarnos en hacer un gran partido e intentar sumar los tres puntos. Tal y como están las cosas por abajo puede pasar cualquier cosa, pero nosotros pensamos en ganar“.
Ante ese escenario, y como suele decir Sergio González, considera que deben esperar “el mejor rival posible” en un Rayo Vallecano al que “Paco Jémez no va a dejar de exigir lo máximo” al margen de eso de lo que siempre se habla en estas fechas (y que no es Eurovisión), los manidos –y prohibidos– maletines, cuya existencia descarta.
Pese al “cariño” que tiene al Rayo, Nacho piensa solo en clave blanquivioleta y en mantener el sueño de la permanencia vivo después de que el triunfo ante el Athletic permitiera salir del descenso. “Al principio parecía que no íbamos a meternos nunca, pero al final lo tocamos. Arde estar abajo, y cuando estás tienes que cambiar cosas, porque necesitas salir de ahí. Sabíamos que lo normal era luchar mucho y creo que hasta la última jornada vamos a tener que luchar”, indicó el lateral.
De cara a la final de Vallecas la afición se va a volver a movilizar a pesar de los elevados precios impuestos por la entidad que preside Martín Presa, no en vano, agotó las entradas más baratas y va camino de hacer lo propio con todo el papel. Junto a ello, la hinchada del Pucela se está encontrando con el respaldo de la vallecana, que a través de redes sociales está cediendo muchos de sus abonos como modo de solidaridad y protesta.
“Me parece muy bien y es una forma de ver la calidad humana de la gente de Vallecas, siempre agradable para ayudar a cualquier persona. Yo les doy las gracias, porque es un gesto bonito. Aunque no me sorprende, les honra. Nuestra actuación está muy volcada con nosotros y es de agradecer, porque cualquier ayuda es buena”, manifestó Nacho sobre esta cuestión.