Que los niños tienen móvil o acceso a internet mucho antes que en pasadas generaciones es algo que todos podemos intuir si miramos a nuestro alrededor, pero ahora, gracias al I Observatorio de Hábitos Digitales en Menores, ya tenemos datos que avalan esa afirmación, y en ellos se muestra que el 42% de los niños usa el móvil antes de cumplir los ocho añitos. Pero más preocupante aún resulta que el 15,3% lo hace antes de los cinco, algo que ha comenzado a inquietar tanto a padres como profesionales, ya que el uso tan temprano a estos dispositivos tiene una serie de efectos sobre el desarrollo emocional y social de los menores.
El problema no se limita solo a la edad de inicio, ya que podemos ver que la intensidad del uso también ha crecido a un ritmo alarmante, algo que se ve en que entre los 15 y los 17 años, un 93% de los jóvenes dedica al menos una hora diaria a las pantallas por ocio, y un 17,5% pasa más de cinco horas conectados. Esto va mucho más allá de mirar el móvil un rato, ya que estamos hablando de una generación que construye su tiempo libre alrededor del internet y encima sin prácticamente ningún tipo de supervisión por parte de los adultos.
Niños conectados desde la infancia
El verano es una de las etapas donde este fenómeno se acentúa gracias a que los menores cuentan con más horas libres y menos estructura, por lo que muchos niños piden el móvil para ver vídeos, jugar o conectarse con amigos. El 81,6% pasa más de una hora diaria frente a las pantallas entre semana, cifra que sube al 90,4% los fines de semana. Es más, durante el sábado y el domingo, el 68% supera las dos horas de ocio digital al día.
Pero no todo es entretenimiento, ya que por desgracia, cuando los adultos intentan limitar el uso, surgen problemas, algo de lo que también tenemos datos que lo avalan. El 53,3% de los niños se muestra irritable o ansioso si se les reduce el tiempo frente a las pantallas, y cerca del 24% incluso experimenta ansiedad si no puede acceder a internet, llegando a padecer reacciones similares a un síndrome de abstinencia leve.
Internet y adolescencia: entre la adicción, el aislamiento y los nuevos hábitos
Debemos tener en cuenta que cuando hablamos de adolescentes, la relación que estos mantienen con internet es más compleja, ya que el 78% admite que tiene una dependencia media o alta de los dispositivos, datos que se pueden desglosar en los sentimientos que les provoca el estar sin móvil. El 45% de los encuestados dicen que se aburren, el 25% se siente desinformado y un 16% experimenta un sentimiento de aislamiento, lo que nos muestra que estas generaciones ven el internet no como una mera herramienta, sino como una extensión de su vida social.
Otro de los puntos que más preocupa es el contenido que los adolescentes consumen, ya que uno de cada tres chicos afirman que visitan páginas pornográficas con frecuencia, lo que contrasta con el dato de las chicas, las cuales solo llegan al 3%.
Cómo los móviles influyen en el rendimiento escolar
Pero este fenómeno también impacta en la vida escolar de los niños y adolescentes, ya que el 37,8% de las familias creen que estar tan expuestos desde el punto de vista digital perjudica el rendimiento escolar de sus hijos, mientras que solo el 4,7% cree que ha mejorado, al ver la tecnología como una herramienta educativa más.
Algunas familias tratan de poner freno a este consumo tan alto del móvil y del internet mandando a sus hijos a campamentos de verano u otras actividades al aire libre, pero la realidad es que un 14% no puede permitirse esto, por lo que los menores se refugian en la época estival en las tecnologías para entretenerse.
 
			