Los de Anquela comenzaron mal el curso, pero remontaron el vuelo a tiempo para salvar a su técnico de la destitución
Para hablar del último tramo del inicio de esta campaña del Numancia se podría recordar a la del Mirandés. Grandes similitudes hay entre sorianos y burgaleses, ya que los dos emergieron de las cenizas desde la jornada catorce. Esta jornada supuso un antes y un después para los caminos de las dos escuadras rojillas y es que, a partir de ese instante, ambos abandonaron zona de descenso y escalaron puestos hasta colocarse por encima de la mitad de tabla.
Pero el comienzo de temporada fue muy preocupante en Soria. La primera jornada el Sporting ganaba en Los Pajaritos y la siguiente los de Anquela se iban de vacío del Benito Villamarín ante el Betis. Mejor sería la visita a Sabadell, donde los rojillos desataron la furia contenida y vapulearon al equipo catalán con un contundente 0-3. Por desgracia el gafe continuaba en casa y en el derbi ante la Ponferradina los sorianos sufrían un 1-3. El miedo escénico afectaba al Numancia en casa, pues en Albacete el equipo rojillo se volvía a llevar los tres puntos.
La ocasión de vencer en su feudo se agravaba y era el Girona quien aguaba el estreno en casa del Numancia con un empate de 2-2. Además el siguiente derbi en Miranda de Ebro se saldaba con derrota de 2-0. El equipo coleaba por el descenso y volvía a sufrir otras dos derrotas consecutivas.
La primera en casa frente al Real Valladolid con el solitario gol del marroquí Bergdich y la segunda en Las Palmas, lugar donde los sorianos firmarían sentencia de muerte al entrar en zona de descenso. Con la derrota en terreno canario el Numancia seguiría una semana más sin ganar en casa tras empatar ante el Leganés.
La última semana de octubre Anquela pudo haber vivido su último encuentro como entrenador numantino, llegó el triunfo en el Nuevo Colombino, repitiendo el marcador de Sabadell. Con el toque de atención, el conjunto soriano no hizo más que mejorar. El cambio no llegaba solo por un aspecto de mentalidad, llegaba por el debut de Julio Álvarez ante el Valladolid a pesar de no ganar hasta tres semanas después.
Con la reaparición del mejor jugador de la Liga Adelante 2013/14 se volvía al cambio de esquema y al característico 4-2-3-1 para acabar de decidirse entre Sergi Enrich o Braian Rodríguez. Anquela prescindió para la titularidad de este último y el atacante balear respondió con dos goles ante el Recreativo.

Este número que aumentaría en la visita con empate en el Miniestadi del Barcelona B y se prolongaría en las victorias seguidas ante Zaragoza (primera victoria en casa), Alavés y Llagostera, sumando así cinco en cinco semanas en noviembre, el mejor mes del Numancia. Tras empatar en Mallorca y decir adiós a las opciones de ascenso en 2014, el año terminó con un inolvidable 6-6 en casa frente al Lugo.
Desde que se inauguró campeonato, el Numancia ha tenido un balance de resultados en casa de dos victorias (Zaragoza y Llagostera), cuatro empates (Girona, Leganés, Osasuna y Lugo) y tres derrotas (Sporting, Ponferradina y Valladolid). A domicilio el conjunto soriano suma cuatro victorias (Sabadell, Albacete, Recreativo y Alavés), dos empates (Barcelona B y Mallorca) y derrotas (Betis, Mirandés y Las Palmas). Es el único equipo de Segunda con mismo número de victorias, empates y derrotas: seis.
Los seis goles ante el Lugo permiten al Numancia estar entre los cinco equipos más goleadores del campeonato liguero, con veintiocho, a cuatro de Las Palmas. Gran parte de esta cifra le pertenece a Sergi Enrich y a sus nueve goles, lo que equivale a un 50% de anotadores en la escuadra rojilla. Supera en cinco a su principal competidor por la delantera, Braian Rodríguez, que tiene cuatro tantos en su haber.
Al igual que el Mirandés, otro defensa es el que cuenta con más minutos en el campo y así es Juanma el que ostenta este liderazgo con 1498 perdiéndose solo el encuentro de la jornada dos frente al Betis. De los veintidós jugadores utilizados por Anquela, siete superan los mil minutos en el campo siendo los más empleados por el técnico andaluz Isidoro (90 mpp.), Regalón (88’4 mpp.), Ripa (82 mpp.) y Antonio Tomás (81’8 mpp.).

