El madrileño, ya recuperado de las molestias que le aquejaron el miércoles, atendió a los medios de comunicación después del entrenamiento vespertino
Foto: Raquel Gómez
El Real Valladolid continúa preparando el importante choque frente al Lugo del próximo domingo. Los blanquivioletas trabajaron en sesión vespertina este jueves, con la presencia de todos los integrantes de la plantilla, incluido Óscar Plano. El madrileño sufrió un golpe en la tibia el miércoles, pero ese pequeño susto está más que superado tal y como el propio jugador confirmó en rueda de prensa. “Me pegó la tibia y me asusté, pero ya estoy bien“, corroboró, sin necesidad de someterse a pruebas.
Sin duda, unas molestias en estos momentos podría suponer perder la titularidad que, parece, tiene ganada, aunque el jugador considera que todos lo merecen. “Somos veinticinco tíos y cualquiera puede jugar, los de arriba somos los que más necesitamos que se nos cambien, y no nos sentimos de ninguna manera. Creo que todo el mundo que sale del banquillo también lo está demostrando”, explicó y puso como ejemplo a su compañero Gianniotas.
Juegue quien juegue el domingo, está claro que habrá que ponerse el mono de trabajo porque enfrente habrá un gran rival, el Lugo. “Viene en racha, nos pondrá las cosas difíciles pero jugamos en casa con nuestra gente y se quedarán en casa los puntos. Sabemos que Zorrilla es un campo complicado, se les hace largo el partido y esperemos que siga así”, dijo, en relación a que el estadio blanquivioleta está siendo un fortín y así debe continuar.
Óscar Plano considera que a ambos conjuntos les gusta “el dominio del balón” por lo que prevé un duelo “bonito”, aunque recalcó que el “factor campo” es importante en este caso. De ganar a los lucenses, el Real Valladolid les adelantaría en la clasificación, algo que el extremo no considera tan importante a estas alturas. “Nos equivocamos si miramos la clasificación porque sabemos cómo es la Segunda División. Tenemos que sacar los tres puntos sin mirar lo que va a suceder”, argumentó.
Lo que sí tienen que tener los blanquivioletas más que estudiado es cómo gestiona el Lugo los minutos finales de los partidos, donde arañan la mayoría de puntos. “Ellos rentabilizan los últimos minutos muy bien y tienen capacidad de sacar puntos”, dijo y volvió a hacer hincapié en la importancia de jugar en casa. A su vez, no considera que Luis César esté dando un tratamiento especial a este choque por haber sido el entrenador lucense durante varias temporadas.
Ya, en el plano personal, Óscar Plano afirmó que todavía le queda un poco para llegar a su “nivel” y que puede dar “un puntito más”. El madrileño achacó esto “a la lesión de pretemporada” que le impidió estar un mes con el grupo, aunque no le preocupa puesto que la liga “es muy larga”.