El punta colombiano, justo cuando iba a rubricar su firma con el Real Valladolid, se echó para atrás al no estar del todo de acuerdo con el contrato.
¿Recuerdan aquel caso de hace exactamente un año en el que Ismail Aissati, cuando estaba ya todo dispuesto para su firma con el Real Valladolid, terminó por echarse atrás a centésimas de segundo de vestir la elástica blanquivioleta por varios años?
En el caso del holandés de origen marroquí fue por culpa de sus representantes, pero en los despachos del José Zorrilla se ha vivido una situación bastante parecida este jueves, cuando Humberto Osorio se encontraba presto para firmar el acuerdo que le vinculaba al equipo pucelano. Al menos por el momento, el punta colombiano no será del Pucela.
Según informa el periódico El Heraldo, del mismo país que el delantero, todo estaba dispuesto para que Osorio estampara su firma, pero no lo hizo. ¿Por qué? Al parecer, el Real Valladolid redujo en un 25% el millón de euros que iba a pagar inicialmente para quedarse con el 30% de los derechos del jugador. Además, el salario estaba acordado en 30.000 euros mensuales, cantidad que el club se había encargado de reducir, el cafetero comprobó que eso no era lo acordado y no dio el OK.
Siempre según informa El Heraldo, el club blanquivioleta fue más allá e incumplió otras promesas, tales como la de conseguirle al delantero un coche propio y un apartamento de alquiler en Valladolid. “Una auténtica falta de respeto”,en palabras del propio Osorio Botello.
Estudiantes, al acecho
“El tema iba por buen camino, pero de repente se cambiaron las pretensiones económicas y opté por no firmar”, ha explicado Osorio en Colombia. “No eran esas las condiciones pactadas, así que ahora es el momento de que vuelva a hablar con mi representante y estudiemos las ofertas que tenemos de México y Argentina”. Bien es sabido que el delantero jugó la última temporada en el San Martín de San Juan argentino, en donde tiene buen cartel gracias a los once goles que marcó en veintiocho partidos.
Y es que Estudiantes de la Plata, con un conocido de la Liga española como es Mauricio Pellegrino en el banquillo, está a la espera de lo que pueda pasar. Su interés por el colombiano era real antes de su ruptura con el Pucela y esta puede ser sin duda su gran oportunidad, pese a que en principio el jugador prefiere jugar en Europa.
El Real Valladolid, que hasta el momento había tanteado incluso la posibilidad de pagar cerca de un millón de euros por Osorio, tendrá que arreglar cuanto antes el desaguisado mediando con el colombiano, al menos si realmente sigue interesado en sus servicios. Aunque ahora volver a negociar con un jugador que se siente engañado se antoja bastante complicado.